FUNDADOR DE LA FAMILIA SALESIANA

FUNDADOR DE LA FAMILIA SALESIANA
SAN JUAN BOSCO (Pinchar imagen)

COLEGIO SALESIANO - SALESIAR IKASTETXEA

COLEGIO SALESIANO - SALESIAR IKASTETXEA
ESTAMOS EN LARREA,4 - 48901 BARAKALDO

BIENVENIDO AL BLOG DE LOS ANTIGUOS ALUMNOS Y ALUMNAS DE SALESIANOS BARAKALDO

ESTE ES EL BLOG OFICIAL DE LA ASOCIACIÓN DE ANTIGUOS ALUMNOS Y ALUMNAS DEL COLEGIO SAN PAULINO DE NOLA
ESTE BLOG TE INVITA A LEER TEMAS DE ACTUALIDAD Y DE DIFERENTES PUNTOS DE VISTA Y OPINIONES.




ATALAYA

ATALAYA
ATALAYA NOVIEMBRE DE 2024

SESIÓN DEL REPARTO DE PREMIOS

SESIÓN DEL REPARTO DE PREMIOS
PINCHAR LA FOTO PARA IR AL ÁLBUM

miércoles, 2 de diciembre de 2020

TRES CAMINOS HACIA JESÚS Domingo 2 Adviento. Ciclo B

FE ADULTA

col sicre

 


El camino poético (Isaías 40,1-5.9-11)

Hacia el año 540 a.C., los judíos llevaban casi cincuenta años desterrados en Babilonia. Años duros, de grandes sufrimientos, de ansia de libertad y de vuelta a la patria. Esa buena noticia es la que anuncia el profeta. Pero el largo camino, a través de zonas a menudo inhóspitas, puede asustar a muchos y desanimarles de emprender el viaje. Entonces, una voz misteriosa, da la orden, no se sabe a quién, de preparar el camino al Señor. No se dirige a hombres, porque la labor que realizarán es sobrehumana: construir en el desierto una espléndida autopista, allanando montes y colina, rellenando valles. Por ella volverá el pueblo judío, acompañado de su Dios, como un pastor apacienta a su rebaño.

El camino ético (Qumrán)

Con el tiempo, la idea de preparar un camino al Señor en el desierto adquirió un sentido nuevo: a mediados del siglo II a.C., un grupo de sacerdotes y seglares judíos, descontentos con el comportamiento de los sumos sacerdotes de Jerusalén y de las costumbres paganas que se estaban introduciendo, recordando el texto del libro de Isaías, decide retirarse al desierto de Judá y allí, en Qumrán, fundar una especie de comunidad religiosa. En el desierto preparan el camino del Señor. Ya no se trata de un camino poético, sino de una conducta conforme a la Ley del Señor. (En hebreo, derek puede significar “camino” y “forma de conducta”, igual que way en inglés).

El camino del Señor Jesús (Mc 1,1-8)

Esta misma interpretación del texto de Isaías es la que aplica el evangelio a Juan Bautista. También él marcha al desierto a preparar un camino. A primera vista parece tratarse de un camino ético, como en Qumrán, ya que Juan exhorta a la conversión y al bautismo para el perdón de los pecados. Pero sus palabras dejan claro que prepara el camino a una persona más poderosa que él y que trae un bautismo superior al suyo: Jesús.

A propósito de la diferencia entre el bautismo de Juan y el de Jesús conviene recordar que el verbo “bautizar” significa en griego “lavar”. Los fariseos, por ejemplo, “bautizan” los platos, los lavan. Pero se puede lavar con agua sola, como hace Juan, que es un lavado superficial, incapaz de limpiar las manchas más profundas; y se puede lavar con “Espíritu Santo” (o “con Espíritu Santo y fuego”, como dice otro texto) limpiando totalmente a la persona.

[En el libro que acabo de publicar, El evangelio de Marcos. Comentario litúrgico al ciclo B y guía de lectura, Verbo Divino 2020, comento con más detalle este pasaje del evangelio en las páginas 46-50.]

Esperad y apresurad la venida del Señor (2 Pedro 3, 8-14)

A mediados y finales del siglo I, muchos cristianos empezaron a sentirse desconcertados. Les habían repetido que la vuelta del Señor y el fin del mundo eran inminentes. Sin embargo, pasaban los años y el Señor no volvía. El autor de la 2ª carta de Pedro (que no es san Pedro) sale al paso de esta inquietud, ofreciendo una respuesta que, después de veinte siglos, no convence demasiado: el Señor no se retrasa, sino que nos da un plazo para que podamos convertirnos. El autor mantiene la postura tradicional de que la llegada del Señor y el fin del mundo será algo repentino, inesperado. Y en vez de quejarnos de que el Señor se retrasa, debemos “esperar y apresurar la venida del Señor”. Además, el fin del mundo será el comienzo de un nuevo cielo y una nueva tierra, y hay que prepararse para recibirlos llevando una vida santa y piadosa, en paz con Dios, inmaculados e irreprochables.

Una ética basada en Jesús

La segunda lectura, igual que el evangelio, une el camino de la ética con el camino que lleva a Jesús: Juan Bautista lo relaciona con la primera venida; la carta de Pedro, con la segunda. La liturgia nos indica que el Adviento no es época de espera pasiva, como quien espera que empiece la película: hay que comprometerse activamente. Y ese compromiso debe basarse en el recuerdo de la venida del Señor y en la esperanza de su vuelta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario