Agur José Mari
Como bien dice la canción de LOS DEL RÍO....
”Algo se muere en el alma, cuando un amigo se va.
Y tú, José Mari, te has ido y a muchos se nos ha muerto algo en el alma.
Porque tú eras UN AMIGO, UN GRAN AMIGO, para muchos....
Antiguos compañeros en el Colegio
Compañeros de correrías infantiles por Reketa, el Castañal o los muelles de Lutxana, para
ver los barcos que llegaban de países lejanos, en aquellos duros años de
nuestra infancia, en plena post-guerra
Compañeros de aquel Grupo: “El Tapiola”, que se
creó, junto a la Iglesia de los Salesianos, en torno a la figura de Marce.
Compañeros de Trabajo
Compañeros de “chiquiteo”
Compañeros de la Asociación de Antiguos Alumnos
Salesianos
Sí, José Mari, a muchos se nos ha muerto algo en el
alma.
Entre ellos, a los que, durante tu hospitalización,
te hemos visitado, y que, a pesar de la gravedad de tu enfermedad, nos recibías
con afecto, con cariño, y agradecías la visita.
Y es que tú, querido José Mari, has sido como esos
deliciosos bombones que “crujen” por
fuera, pero por dentro, en el corazón, son todo ternura, dulzor, y que dejan...
“un buen sabor se boca” durante mucho tiempo.
Por eso, querido José Mari, al despedirte también
tiene sentido la segunda parte del estribillo de la canción de LOS DEL RÍO....
”Algo se
muere en el alma, cuando un amigo se va....
.....y va
dejando una huella que no se puede borrar”
¡Agur
eta ohore!
¡Agur, José Mari!