FUNDADOR DE LA FAMILIA SALESIANA

FUNDADOR DE LA FAMILIA SALESIANA
SAN JUAN BOSCO (Pinchar imagen)

COLEGIO SALESIANO - SALESIAR IKASTETXEA

COLEGIO SALESIANO - SALESIAR IKASTETXEA
ESTAMOS EN LARREA,4 - 48901 BARAKALDO

BIENVENIDO AL BLOG DE LOS ANTIGUOS ALUMNOS Y ALUMNAS DE SALESIANOS BARAKALDO

ESTE ES EL BLOG OFICIAL DE LA ASOCIACIÓN DE ANTIGUOS ALUMNOS Y ALUMNAS DEL COLEGIO SAN PAULINO DE NOLA
ESTE BLOG TE INVITA A LEER TEMAS DE ACTUALIDAD Y DE DIFERENTES PUNTOS DE VISTA Y OPINIONES.




ATALAYA

ATALAYA
ATALAYA

sábado, 23 de julio de 2011

Facundo Cabral Mas allá del padre


Leonardo Belderrain sacerdote bioeticista (Buenos Aires-Argentina)

“Me marché del pueblo dejando una novia. Muchos años después, al volver, me encontré una cuñada. Me quedé mirándola y, al ver lo que había hecho el tiempo con ella, me acerqué a mi hermano y le dije: ¡Gracias!.En aquella ocasión, mi hermano, acudió borracho a una fiesta del pueblo y sacó a bailar a una gorda vestida de negro, la que le dijo: No quiero bailar con usted por tres razones, porque usted está borracho, porque no sé bailar y porque soy ¡¡ el obispo!!!.”
Decía Lacan que cuando uno se queda en el padre, se queda gozado por el otro, se victimiza. No sucede esto con Facundo: es salvado de las aguas como Moisés, conoce a los 46 años a su padre biológico y con su vida lo trasciende.
El desenfado, la calle, la humanidad y la ternura, milagrosamente articuladas, lo instalan, como hubiese dicho Niestzsche, en un cristiano al revés; marcado por la sobreabundancia y no por el resentimiento. Quizás yo no he conocido místico y poeta con más necesidad de revolución social que él. Recordamos sus dichos. Su vida estuvo marcada por su encuentro con la monja de Calcuta. Pregunté – refiere él- a la Madre Teresa, : ¿cuándo descansa? y me dijo: Descanso en el amor. Le pregunté: ¿Cuál es el lugar del hombre? y me dijo: Donde sus hermanos lo necesitan.
Una señora –agrega- impresionada por verla bañar a un leproso, le dijo: yo no bañaría a un leproso ni por un millón de dólares, a lo que Teresa contestó: Yo tampoco, porque a un leproso sólo se lo puede bañar por amor. Hablaba desde una experiencia de Dios propia y heredada
La oración dilecta de mi madre decía: Señor, te pido perdón por mis pecados; ante todo por haber peregrinado a tus muchos santuarios, olvidando que estás presente en todas partes. En segundo lugar, te pido perdón por haber implorado tantas veces tu ayuda, olvidando que mi bienestar te preocupa más a ti que a mi. Y por último te pido perdón por estar aquí pidiéndote que me perdones, cuando mi corazón sabe que mis pecados son perdonados antes que los cometa, ¡ tanta es tú misericordia, amado Señor!.LEER MÁS