Coordinadora solidaridad Venezuela

Diferentes
reacciones ha causado, a nivel nacional e internacional, la sentencia
156 emitida este miércoles en la noche por la Sala
Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), en la que se declara que, mientras persista la situación de desacato, las
competencias de la Asamblea Nacional serán ejercidas directamente por la Sala Constitucional del máximo tribunal del país.
Julio Borges,presidente del parlamento, aseguró que hay un “golpe de Estado” y llamó a desconocer al TSJ.
Luis Almagro, secretario general de la OEA,también ha calificado la
sentencia de un “auto-golpe de Estado” y convocó urgentemente a un nuevo
Consejo Permanente de la organización.
Perú retiró a su embajador en Venezuela, argumentando que la sentencia
es “una ruptura del orden constitucional y democrático”. Las redes
sociales posicionan la frase “Golpe de Estado” en primer lugar.
Como se recordará, el Poder Legislativo venezolano, de mayoría
opositora al gobierno de Nicolás Maduro, se encuentra en desacato desde
2016.
En las elecciones legislativas del 6 de diciembre de 2015, se
denunciaron hechos de fraude en el estado Amazonas, respaldados por
grabaciones en las cuales la entonces secretaria de la gobernación de
Amazonas, Victoria Franchi, ofrecía sumas de dinero a grupos de personas
para votar por los candidatos opositores. Por ello, el TSJ suspendió
las proclamaciones de los diputados de Amazonas.
Sin embargo, la Asamblea Nacional persistió en juramentar como diputados a tres candidatos del estado Amazonas.
Su juramentación era importante para la oposición, pues le daba la
posibilidad de tener mayoría absoluta en la Asamblea Nacional (dos
tercera partes de los diputados), lo que les daba nuevas facultades y
atribuciones, incluyendo la de derogar o reformar leyes orgánicas, como
la Ley del Trabajo o la Ley de Educación.
Por realizar dicha juramentación ilegalmente, el Tribunal Supremo de
Justicia declaró a la Asamblea Nacional en desacato y señaló que sus
decisiones son nulas mientras continúen en esa situación. La junta
directiva de la AN se ha negado a anular la juramentación de estos tres
ciudadanos, lo que requiere una serie de pasos y debe ser realizado por
la Junta Directiva que los proclamó.
Posteriormente, en enero de 2017, la Asamblea Nacional continuaba en
desacato, pero aún así fue juramentada una nueva Junta Directiva, y el
diputado Julio Borges se autojuramentó como nuevo presidente de la
Asamblea, acto realizado el pasado 5 de enero.
Cuatro días después, el 9 de enero, esta Asamblea Nacional declaró el
supuesto “abandono de cargo” del Presidente Nicolás Maduro, uno de los
causales en la Constitución por las cuales se puede convocar a nuevas
elecciones presidenciales. En esa misma sesión, la nueva Junta Directiva
previamente anuló la juramentación de los 3 diputados de Amazonas,
alegando que así no se podría argumentar que están en desacato…
El máximo tribunal del país respondió en una nueva sentencia el 31 de
enero, fijando los criterios en los cuales se puede declarar abandono de
cargo, y declarando que los actos de la nueva Junta Directiva son
nulos, pues la misma fue juramentada estando la Asamblea Nacional en
desacato (la directiva anterior era la que debía anular las
juramentaciones de los diputados).Por ello, la anulación de los 3
diputados de Amazonas hecha el 9 de enero no se consideró válida.
El miércoles -29 de marzo- la Sala Constitucional del TSJ emitió la
sentencia 156 en la que resolvió, “ante el desacato de la Asamblea
Nacional”, que “no existe impedimento alguno para que el Ejecutivo
Nacional constituya empresas mixtas en el espíritu que establece el
artículo 33 de la Ley Orgánica de Hidrocarburos”.
La sentencia también advirtió que, “mientras persista la situación de
desacato y de invalidez de las actuaciones de la Asamblea Nacional”
Si la Asamblea Nacional cumpliera todos los pasos para eliminar la
condición de desacato, incluyendo la anulación de la juramentación de
los diputados de Amazonas, la propia sentencia señala que la inmunidad y
las competencias parlamentarias retornarán de nuevo a la Asamblea
Nacional…
El jueves, 30 de marzo, el presidente de la Asamblea Nacional y
diputado por el partido de derecha Primero Justicia, Julio Borges,
reaccionó ante las dos sentencias del Tribunal Supremo. Realizó una
rueda de prensa en la que anunció que desconocía al TSJ y que “se
rebela” ante la decisión de la Sala Constitucional. Igualmente,
solicitan al sector militar ser fieles a la Constitución.
Rompiendo una copia del documento, Borges señaló que “esta Asamblea
Nacional desconoce el Tribunal Supremo de Justicia. ..Asimismo, pidió
el apoyo de todos los países de la Organización de Estados Americanos
(OEA) para que se active la Carta Democrática y “que se realicen de una
vez por todas las elecciones regionales”…
Además Julio Borges hizo un llamado para que este sábado se realicen
diferentes movilizaciones. “Convocamos para este sábado acción de
calle y para la próxima semana una gran movilización”.
Por su parte, Henrique Capriles, excandidato opositor y gobernador del
estado Miranda, aseguró en una rueda de prensa que el decreto del TSJ es
un “Madurazo” y un supuesto golpe de Estado, y llamó a la Organización
de Estados Americanos a convocar “de emergencia” a su Consejo
Permanente. “Hay que convocar de emergencia al Consejo Permanente para
que la instancia de América sea la primera en pronunciarse”, explicó el
dirigente del partido Primero Justicia.
Por su parte, el Secretario General de la Organización de los Estados
Americanos (OEA), Luis Almagro, emitió un comunicado denunciando un
supuesto “auto-golpe de Estado perpetrado por el régimen venezolano
contra la Asamblea Nacional, último poder del Estado legitimado por el
voto popular”…
En el comunicado, señala que “asumir la restauración de la democracia
es tarea de todos. Hoy es hora de trabajar unidos en el hemisferio para
recuperar la democracia en Venezuela, con cuyo pueblo todos tenemos
deudas que nos obligan a actuar sin dilaciones. Callar ante una
dictadura es la indignidad más baja en la política”.
Intentando citar al prócer independentista José Gervasio Artigas,
Almagro continuó su comunicado con la frase: “La cuestión es sólo
entre la libertad y el despotismo” y añadió: “nuestros opresores ? y son
nuestros opresores porque la libertad de los pueblos es la esencia
misma de nuestra libertad? sólo por serlo forman el objeto de nuestra
lucha”.
El Secretario General de la OEA dijo que es urgente la convocatoria de
un Consejo Permanente en el marco del artículo 20 de la Carta
Democrática…
Todo parece indicar que los sectores de la derecha nacional e
internacional aprovecharán la sentencia para intentar nuevamente la
aplicación de la Carta Democrática contra Venezuela, esta vez con una
nueva excusa: un supuesto “golpe de Estado”, que en realidad es una
respuesta dada por el TSJ para intentar resolver la grave situación que
vive el país, dado que la Asamblea Nacional no está ayudando en ese
sentido, sino que prácticamente se ha anulado a sí misma.
Todo señala que la oposición venezolana necesita que la OEA invoque los
artículos 21 y 22 de la Carta Democrática para lograr la suspensión de
Venezuela en la organización, con el fin de lograr sanciones que
empeoren la situación del país y causen una crisis
humanitaria. Justo la condición que el Comando Sur estadounidense
necesita para justificar una intervención militar a la nación con las
mayores reservas petroleras del mundo.
Coordinadora Solidaridad Venezuela