FUNDADOR DE LA FAMILIA SALESIANA

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SAN JUAN BOSCO (Pinchar imagen)

COLEGIO SALESIANO - SALESIAR IKASTETXEA

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ATALAYA

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domingo, 8 de enero de 2012

Aguinaldo 2012: Conociendo e imitando a Don Bosco, hagamos de los jóvenes la misión de nuestra vida


El Aguinaldo 2012 que el Rector Mayor ofrece a la Familia Salesiana forma parte del camino indicado a los Salesianos con motivo del Bicentenario del nacimiento de Don Bosco (1815-2015), oficialmente iniciado el 16 de agosto. Los 28 grupos de la Familia Salesiana están llamados a conocer de manera más profunda la historia de Don Bosco para reconstruir, hoy, su imagen y perpetuar la misión a ella confiada: la educación y la evangelización de los jóvenes.
Puede descargarse el texto completo del Aguinaldo 2012

ENTREVISTA A JESÚS ROMERO, MIEMBRO DE LA COMUNIDAD DE SANT’EGIDIO


La paz necesita paciencia
La no violencia surgió como un movimiento de lucha y resistencia contra el colonialismo, el racismo o las dictaduras. Hoy es, sobre todo, un método ineludible de resolución de conflictos. A todos los niveles: desde la comunidad de vecinos y vecinas a las guerras que salpican el mundo. No basta con resistir; hay que respetar a la otra persona, dialogar y encontrar puntos comunes de entendimiento. Solo así se alcanza de verdad la paz. Lo explica a las claras Jesús Romero, miembro de la Comunidad de Sant’Egidio, que tiene en su haber el éxito de negociaciones en conflictos tan enquistados como los de Mozambique, Guatemala o Burundi.
LEER ENTREVISTA EN ALANDAR

Un cónclave curial, europeo y a la medida de Bertone



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El próximo 18 de febrero, la Iglesia católica contará con 22 nuevos cardenales, 18 de ellos electores en un hipotético cónclave. Con el nombramiento de Santos Abril,España tendrá 10 cardenales, la mitad de ellos con posibilidades de votar nuevo Papa. El consistorio anunciado ayer por Benedicto XVI, el cuarto de su pontificado, deja varias claves de futuro. La primera, el incremento de cardenales curiales, e italianos. Italia, con 30 purpurados electores, se vuelve a convertir en la clave de un hipotético cónclave.
Una reunión que sería eminentemente europea (67 de los purpurados vienen del Viejo Continente). Muchos de los nombrados, además, son ciertamente afines al secretario de Estado, Tarcisio Bertone, quien tras graves problemas ha logrado hacerse un hueco, y con mando en plaza, en una sede tan complicada como la más cercana al sucesor de Pedro.
Extrañan los olvidos de Benedicto XVI a los continentes emergentes: no se ha nombrado a ningún africano, y es patente la ausencia de latinoamericanos y poca, casi nula, presencia nueva de asiáticos. Tal vez tenga que ver con el deseo del Papa de afrontar lanueva evangelización en el Viejo Continente. O tal vez Benedicto XVI esté preparando el cónclave que le suceda. Y si es así, las claves son claras: un futuro pontífice italiano y curial. Y con Bertone como gran elector.



JOSÉ ANTONIO PAGOLA :BAUTISMO DEL SEÑOR 2012


PASAR DE DIOS
Os bautizará con Espíritu Santo
Mc. 1, 6b-11

A nuestra vida, para ser humana, le falta una dimensión esencial: La interioridad. Se nos obliga a vivir con rapidez, sin detenernos en nada ni en nadie, y la felicidad no tiene tiempo para penetrar hasta nuestra alma.
Pasamos rápidamente por todo y nos quedamos casi siempre en la superficie. Se nos está olvidando escuchar y mirar la vida con un poco de hondura y profundidad.
El silencio nos podría curar, pero ya no somos capaces de encontrarlo en medio de nuestras mil ocupaciones. Cada vez hay menos espacio para el espíritu en nuestra vida diaria. Por otra parte, ¿quién se atreve a ocuparse de cosas tan sospechosas como la vida interior, la meditación o la búsqueda de Dios?.
Privados de vida interior, sobrevivimos cerrando los ojos, olvidando nuestra alma, revistiéndonos de capas y más capas de proyectos, ocupaciones, ilusiones y planes. Nos hemos adaptado ya y hasta hemos aprendido a vivir “como cosas en medio de cosas”
Pero lo triste es observar que, con demasiada frecuencia, tampoco la religión es capaz de dar calor y vida interior a las personas. En un mundo que ha apostado por lo “exterior”, Dios queda como un objetivo demasiado lejano y, a decir verdad, de poco interés para la vida diaria.
Por ello, no es extraño ver que muchos hombres y mujeres “pasan de Dios”, lo ignoran, no saben de qué se trata, han conseguido vivir sin tener necesidad de El. Quizás existe, pero lo cierto es que no les “sirve” para nada útil.
Los evangelistas presentan a Jesús como el que viene a “bautizar con Espíritu Santo, es decir, como alguien que puede limpiar nuestra existencia y sanarla con la fuerza del Espíritu. Y, quizás, la primera tarea de la Iglesia actual sea, precisamente, la de ofrecer ese “Bautismo de Espíritu Santo” al hombre de hoy.
Necesitamos ese Espíritu que nos enseñe a pasar de lo puramente exterior a lo que hay de más íntimo en el hombre, en el mundo y en la vida. Un Espíritu que nos enseñe a acoger a ese Dios que habita en el interior de nuestras vidas y en el centro de nuestra existencia.
No basta que el Evangelio sea predicado con palabras. Nuestros oídos están demasiado acostumbrados y no escuchen ya el mensaje de las palabras. Sólo nos puede convencer la experiencia real, viva, concreta de una alegría interior nueva y diferente.
Hombres y mujeres, convertidos en paquetes de nervios excitados, seres movidos por una agitación exterior vacía, cansados ya de casi todo y sin apenas alegría interior alguna, ¿podemos hacer algo mejor que detener un poco nuestra vida, invocar humildemente a un Dios en el que todavía creemos y abrirnos confiadamente al Espíritu que puede transformar nuestra existencia? 
ESCUCHAR LO QUE DICE EL ESPÍRITU


Los primeros cristianos vivían convencidos de que para seguir a Jesús es insuficiente un bautismo de agua o un rito parecido. Es necesario vivir empapados de su Espíritu Santo. Por eso en los evangelios se recogen de diversas maneras estas palabras del Bautista: «Yo os he bautizado con agua, pero él (Jesús) os bautizará con Espíritu Santo». 
No es extraño que en los momentos de crisis recordaran de manera especial la necesidad de vivir guiados, sostenidos y fortalecidos por su Espíritu. El Apocalipsis, escrito en los momentos críticos que vive la Iglesia bajo el emperador Domiciano, repite una y otra vez a los cristianos: «El que tenga oídos, que escuche lo que el Espíritu dice a las Iglesias».
La mutación cultural sin precedentes que estamos viviendo, nos está pidiendo hoy a los cristianos una fidelidad sin precedentes al Espíritu de Jesús. Antes de pensar en estrategias y recetas automáticas ante la crisis, hemos de preguntarnos cómo estamos acogiendo hoy nosotros el Espíritu de Jesús.
En vez de lamentarnos una y otra vez de la secularización creciente, hemos de preguntarnos qué caminos nuevos anda buscando hoy Dios para encontrarse con los hombres y mujeres de nuestro tiempo; cómo hemos de renovar nuestra manera de pensar, de decir y de vivir la fe para que su Palabra pueda llegar hasta los interrogantes, las dudas y los miedos que brotan en su corazón.
Antes de elaborar proyectos pensados hasta sus últimos detalles, necesitamos transformar nuestra mirada, nuestra actitud y nuestra relación con el mundo de hoy. Necesitamos parecernos más a Jesús. Dejarnos trabajar por su Espíritu. Sólo Jesús puede darle a la Iglesia un rostro nuevo.
El Espíritu de Jesús sigue vivo y operante también hoy en el corazón de las personas, aunque nosotros ni nos preguntemos cómo se relaciona con quienes se han alejado definitivamente de la Iglesia. Ha llegado el momento de aprender a ser la «Iglesia de Jesús» para todos, y esto sólo él nos lo puede enseñar.
No hemos de hablar sólo en términos de crisis. Se están creando unas condiciones en las que lo esencial del evangelio puede resonar de manera nueva. Una Iglesia más frágil, débil y humilde puede hacer que el Espíritu de Jesús sea entendido y acogido con más verdad.LEER MÁS