FUNDADOR DE LA FAMILIA SALESIANA

FUNDADOR DE LA FAMILIA SALESIANA
SAN JUAN BOSCO (Pinchar imagen)

COLEGIO SALESIANO - SALESIAR IKASTETXEA

COLEGIO SALESIANO - SALESIAR IKASTETXEA
ESTAMOS EN LARREA,4 - 48901 BARAKALDO

BIENVENIDO AL BLOG DE LOS ANTIGUOS ALUMNOS Y ALUMNAS DE SALESIANOS BARAKALDO

ESTE ES EL BLOG OFICIAL DE LA ASOCIACIÓN DE ANTIGUOS ALUMNOS Y ALUMNAS DEL COLEGIO SAN PAULINO DE NOLA
ESTE BLOG TE INVITA A LEER TEMAS DE ACTUALIDAD Y DE DIFERENTES PUNTOS DE VISTA Y OPINIONES.




ATALAYA

ATALAYA
ATALAYA

miércoles, 29 de febrero de 2012

Iglesia y crisis


Rafael Padilla

LA noticia puede parecer intrascendente, pero revela la necesidad de que la jerarquía de la Iglesia empiece a hacer oír su voz -nítida, valiente y evangélica- frente a la pavorosa crisis que sufrimos. El joven obispo de Solsona, consciente de la eficacia pedagógica del ejemplo, se ha rebajado su sueldo un 25% (va a ganar unos 900 euros) y se propone destinar el 10% del presupuesto del obispado (en torno a 300.000 euros) al Plan de Ayuda Social de Cáritas Diocesana.
Además, monseñor Novell no enmudece a la hora de identificar culpables. Para él, los banqueros, los mercados y la versión más despiadada del capitalismo están en el origen de esta monumental locura. A ellos les atribuye la diabólica habilidad de habernos introducido en una espiral consumista insostenible y arrastrado -engañoso canto de sirena- a vivir muy por encima de nuestras posibilidades. Eso, para ganancia de los menos, es lo que, al cabo, hicimos: ciudadanos y administraciones públicas hemos hipotecado estúpidamente nuestro futuro y el de nuestros hijos.
Su actitud no debería ser insólita en la Iglesia española de hoy. Ésta, lo sé, no es el Gobierno, ni puede pretender sustituirle. Y tampoco sería sensato, porque la Biblia no es un Tratado de Economía, exigirle el diseño de soluciones inmediatas a los problemas económicos. Pero sí necesitamos de ella denuncia e implicación. Lo primero supone desenmascarar la iniquidad de los poderosos.
No basta -El Vaticano lo hizo a finales de 2011- con sugerir utópicos gobiernos universales: como Jesús, hay que desvelar, sin falsas caridades, el rostro de los malvados, señalar sus crímenes sociales y reclamar que no acaben amparados en la impunidad. A Cristo lo crucificaron no por sus milagros o por su amor hacia los pobres, sino porque se atrevió a maldecir a estafadores, canallas e hipócritas.
Lo segundo, la implicación, demanda orientar, desde la dignidad de nuestros principios, con ideas y con acciones, los durísimos tiempos que vienen. Obviamente tendremos que acompañar a las víctimas y dulcificar, incluso hasta lo imposible, su escandaloso infortunio. La Iglesia está obligada a poner todos sus recursos al servicio de una sociedad que se desmorona,
Y, si no se quiere desmentir el mensaje, todos son todos. No ha de faltar tampoco una luz visible y franca que preserve el hilo de la solidaridad: cualquier iniciativa de recorte, la formule quien la formule, debe ser analizada, enjuiciada y, si es el caso, combatida, según sea justo o injusto el reparto de sacrificios. A la Iglesia, al fin, legitimada por sus hechos, le incumbe la gigantesca tarea de ayudarnos a emprender un desarrollo viable y común, sin cadáveres útiles ni horizontes robados.
Los días que llegan lo pondrán todo en entredicho. Y tanto la vigencia mantenida de la buena nueva, como la sinceridad y el coraje de sus apóstoles y seguidores, desde luego no constituirán una excepción.

martes, 28 de febrero de 2012

Reavivar fe y reinterpretar creencias


Teologías en entredicho
Juan Masiá Clavel, teólogo

(Reproduzco en estos 8 posts extractos del epílogo de TEOLOGÍAS EN ENTREDICHO, publicación que recoge las ponencias de la Escuela de Teología K. Rhaner-H.U. Von Balthasar, organizada por la UIMP, sede de Santander, en agosto 2011)
Teologías en la encrucijada, teólogos y teólogas en entredicho
Un rasgo común en la mayoría de autores de la presente recopilación es su conciencia de encontrarse en una encrucijada difícil al confrontar desde la teología los desafíos de la situación actual de pluralismo y secularización de la sociedad. La encrucijada conlleva, a la vez, el riesgo de los atascos y la oportunidad de los intercambios. En la encrucijada de la situación actual se lleva a cabo un intercambio fecundo y transformador entre diversas teologías.
Esa encrucijada es un espacio o locus theologicus, para cultivar la fe hoy, desde ayer y para mañana: desde las tradiciones heredadas del ayer de la historia por “comunidades de interpretación” y transmisión de la fe -como diría Paul Ricoeur-, y de cara al mañana incierto de los nuevos desarrollos de esa fe mediante el intercambio fecundo con otras vivencias y expresiones diversas del modo de creer.
Roger Haight se situaba ante la realidad de un cristianismo occidental “en período de declive”, que no se debe al sentido interno del mensaje cristiano, sino “al modo como es presentado en esta cultura”. Concluía que “el cristianismo puede considerarse construído en torno a dos narraciones: la de Jesús, conservada en los evangelios, y la meta-narración cristiana que se fue construyendo gradualmente en torno a una espiritualidad de seguir a Jesús, que las personas en actitud de búsqueda espiritual representativas de nuestra cultura encontrarán viable”.
José María Castillo nos indicaba, con las tres palabras del título de su ponencia -Cristo, cristianismo y cristiandad-, “el proceso de una desviación, que ha llevado al movimiento original de Jesús a la situación de ambigüedad en la que se ha desarrollado y llegado hasta nosotros”.
Kotaró Suzuki y Enrique Martínez Lozano, con sus respectivos enfoques transpersonales, se ven acosados desde el doble frente de los monismos impersonales orientales y los teísmos antropomórficos occidentales.
Juan José Tamayo afronta y asume la radicalidad de Jesús, sin miedo a reconocer la paradoja de un cristianismo definible como religiosidad laica.
Y Diego Gracia, en la encrucijada de ética laica y morales religiosas, pone de relieve la difícil secularización de la ética y la necesidad de dilucidar las áreas respectivas de la experiencia religiosa del sentido y la experiencia ética de la obligación.
Las reflexiones de estos autores, aducidos como muestra, se verán, sin duda, puestas en entredicho por parte de recensiones de su pensamiento desde los dos extremos del espectro teológico: el conservadurismo anclado en la tradición y el progresismo a ultranza que prescinde de ella. Sin pretensiones de añadir con originalidad nuevos planteamientos a los de éstas y las demás ponencias, me limito a recoger en este ensayo final su relevo; para pasar el testigo al público que prolongue la marcha hacia la meta dejaré, a continuación, la sugerencia de las siete propuestas siguientes.

lunes, 27 de febrero de 2012

Ha muerto Giulio Girardi


Benjamín Forcano, 26-Febrero-2012

Amigos/amigas.
Acabo de recibir de Bruno Bellerate,
cuidador hasta el final de Giulio, esta noticia:
“Queridísimos , por desgracia esta noche ( sábado 25)
ha muerto Giulio Girardi. Un abrazo”.
Giulio fue, para quienes lo conocimos, entrega absoluta
a la causa del Reino, concretada en los excluidos y oprimidos.
Será difícil encontrar alguien que, con tanta lucidez y amor,
de pensamiento, palabra y obra, haya hecho de ella el centro de su vida.
Y, además, con un desposeimiento, sencillez y generosidad que lo
hacen acreedor al  retablo de nuestros santos. Es mucho
lo que las bases,  el movimiento y la teología de liberación, en definitiva,
la Iglesia de Jesús  le debemos.
Un fuerte abrazo
Benjamín Forcano

El gran inquisidor


José María Castillo, teólogo

Todos los años, en la misa del domingo primero de cuaresma, se lee el evangelio de las tentaciones de Jesús en el desierto. Un relato que se encuentra en los tres evangelios sinópticos, en Marcos sólo de forma muy resumida, en Mateo y Lucas más detallado.
Como es sabido, sobre este evangelio de las tentaciones de Jesús, F. Dostoyevsky, en “Los Hermanos Karamazov (l. V, c. 5), escribió una de sus reflexiones más sublimes, desde el punto de vista literario, y más profundas desde el punto de vista antropológico. La lectura religiosa, que se puede hacer de este texto, es problemática. En todo caso, se trata de un texto que da mucho que pensar. Por eso me ha parecido que puede ofrecer elementos de juicio para una lectura provechosa precisamente en la situación de crisis que estamos viviendo.
La acción se desarrolla en Sevilla, en la época más terrible de la Inquisición, cuando a diario se repetían los patéticos “autos de fe” en los que eran quemados vivos los herejes. En tal momento, un buen día e inesperadamente, Jesús vuelve a este mundo y se pone a caminar por las calles de la ciudad.
Inmediatamente el cardenal, que ostenta el cargo de Gran Inquisidor, manda a la guardia del Santo Oficio con la orden tajante de detener a Jesús, que es llevado ante el Inquisidor, que enseguida le hace a Jesús la gran pregunta: “¿Por qué has venido a trastornarnos?” Jesús no responde nada. Se limita a mirar con respeto y bondad al severo cardenal. Y es entonces cuando el Gran Inquisidor le plantea a Jesús el gran alegato, del que me limito a reproducir aquí sólo algunos textos que nos obligan a reflexionar, a mí el primero, sobre lo que es verdaderamente decisivo en nuestras vidas y en nuestras conductas.
Me refiero a una de las afirmaciones más fuertes que el Inquisidor hace en su discurso cuando le echa en cara a Jesús: “Quieres ir por el mundo con las manos vacías, predicando una libertad que los hombres, en su estupidez y su ignorancia naturales, no pueden comprender; una libertad que los atormenta, pues no hay ni ha habido jamás nada más intolerable para el hombre y la sociedad que ser libres”. Y el Inquisidor continúa: “no hay para el hombre libre cuidado más continuo y acuciante que el de hallar a un ser al que prestar acatamiento”.
Más aún, añade el cardenal: “Te lo repito: no hay para el hombre deseo más acuciante que el de encontrar a un ser en quien delegar el don de la libertad que, por desgracia, se adquiere con el nacimiento… No hay nada más seductor para el hombre que el libre albedrío, pero también nada más doloroso”. Y es en este momento cuando el Inquisidor le lanza a Jesús la acusación más dura: “Aumentaste la libertad humana en vez de confiscarla, y así impusiste para siempre a los espíritus el terror de esta libertad”. Y el terrorífico clérigo prosigue más adelante: “Así, las consecuencias de tu amarga lucha por la libertad humana fue la inquietud, la agitación y la desgracia para los hombres”.
Por tanto, a juicio de Dostoyevsky, mientras que la gran obra de Jesús fue defender la libertad de los seres humanos, el pánico insoportable de éstos es precisamente tener que aceptar y vivir la libertad. Ahora bien, esto supuesto, el veredicto del Inquisidor resulta patético cuando intenta justificar el comportamiento de la Iglesia: “Esto es lo que hemos hecho. Hemos corregido tu obra, fundándola en el milagro, el misterio y la autoridad. Y los hombres se alegran de verse otra vez conducidos como un rebaño y libres del don abrumador que los atormenta”.
Y es entonces cuando el Inquisidor escupe con sus palabras sobre el limpio rostro de Jesús la terrible sentencia: “Tú habrías podido empuñar la espada de César. ¿Por qué rechazaste este último don? Si hubieras seguido ese tercer consejo del poderoso Espíritu, habrías dado a los hombres todo lo que buscan sobre la tierra: un dueño ante el que inclinarse, un guardián de su conciencia y el medio de unirse al fin cordialmente en un hormiguero común, pues la necesidad de la unión universal es el tercero y último tormento de la raza humana”.
Ahora, precisamente ahora, cuando nos debatimos en el miedo espantoso de la crisis. Y el miedo más espantoso del futuro que nos puede esperar. Ahora exactamente es cuando, por más pánico que nos dé pensarlo, es cuando estamos dando los primeros pasos decisivos para el logro de un mundo global, de una economía global, de un pensamiento único global….
Aspiramos a que un poder económico más fuerte nos someta más a todos. Anhelamos tener un poder político más sólido, más unido, más eficaz, más contundente… ¿Para qué? Para que nos quiten de encima el peso insoportable de la libertad. Soñamos con el “milagro” (¿el alemán, el americano, el chino…?), ansiamos la presencia del “misterio” (¿el de la tecnología, la medicina, la ciencia…?), y sobre todo lo que más deseamos, la “autoridad” (¿la del político genial, un papa llovido del cielo, un hombre de excepción que se imponga ya, de una vez y para siempre, a todos los canallas y los corruptos?).
El relato termina de forma inesperada: “De pronto, el Preso se acerca en silencio al nonagenario (Inquisidor) y le da un beso en los labios exangües. Ésta es su respuesta. El viejo se estremece, mueve los labios sin pronunciar palabra. Luego se dirige a la puerta, la abre y dice: “¡Vete y no vuelvas nunca, nunca!” Y lo deja salir a la ciudad en tinieblas. El Preso se marcha”.

domingo, 26 de febrero de 2012

Condena internacional al Estado español


Archivo (AP Photo)

Helena Maleno

El Comité contra la Tortura de Naciones Unidas obliga al Estado español a hacer justicia en el caso de Lauding Sonko, inmigrante senegalés muerto en 2007 a manos de la Guardia Civil, cuando intentaba cruzar a nado hacia Ceuta.
Archivo (AP Photo)El Estado, en su defensa, explicó que los hechos habían sido archivados por un juzgado de Ceuta, pero el Comité considera que “cabe al Estado parte explicar las circunstancias de la muerte del Sr. Sonko, toda vez que le han rescatado con del agua con vida.
El Comité considera, asimismo, que independiente del hecho de que los guardias civiles hayan pinchado el flotador del Sr. Sonko o a qué distancia de la orilla lo hayan depositado, este fue dejado en condiciones que le causaran la muerte”. Ya que el comité observa que “los guardias civiles mantuvieron el control sobre las personas a bordo y eran por tanto responsables de su integridad”.
Además, el Comité considera la imposición de “sufrimiento físico y mental antes de su muerte, agravada por la particular vulnerabilidad del autor como migrante”. El Comité condena al Estado español por violación de los artículos 16 y 12 de la Convención Contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos y Degradantes.
El comité “insta al Estado parte a efectuar una investigación adecuada e imparcial de los hechos que se produjeron el 26 de septiembre de 2007, a perseguir y condenar a las personas responsables de esos actos y a conceder una reparación integral que incluya una indemnización adecuada a la familia del Sr. Sonko… el Comité desea recibir en un plazo de 90 días, a partir de la fecha de transmisión de la presente decisióm, información sobre toda medida que hay adoptado en respuesta a las observaciones formuladas supra”.
El caso de Lauding, que acabó en una tragedia irreparable, forma parte de una lista interminable de devoluciones ilegales e inhumanas efectuadas en la frontera de Ceuta.
El protocolo de devoluciones aplicado por la Guardia Civil a Sonko consistía en recoger a los inmigrantes mientras estaban nadando, subirlos al barco, y volver a tirarles al agua, para que volviesen a nadar en dirección a la playa marroquí. Muchas personas que habían sufrido esta práctica llegaban extenuadas, con hipotermias y eran detenidas por la gendarmería marroquí. Se quejaban también los inmigrantes que los guardias civiles les hacían fotos antes de volver a obligarles a nadar.
Así fue devuelto dos veces Smael, tras haber pedido asilo. Una de las veces casi pierde la vida y tuvo que recibir asistencia médica en Castillejo, ciudad fronteriza con Ceuta. “No me extrañó la muerte de Sonko, lo que me sorprende es que no hayan muerto muchos más, aunque claro no cuentan las personas desaparecidas a las que sus familias siguen buscando. La familia de Sonko al menos tiene la suerte de saber lo que pasó con él y dónde está enterrado”, Smael habla desde un profundo dolor porque en una de esas “deportaciones” de nuestras fuerzas de seguridad estuvo desaparecido para amigos y familiares durante quince días.
Lo peor de todo esto es que la muerte de Sonko no fue provocada por unos guardias civiles actuando de forma arbitraria, sino por un cuerpo de seguridad que cumplía órdenes de la Delegación de Gobierno de Ceuta. Esta práctica era institucional, lo que dificultó las investigaciones del caso Sonko y provocó que nuestra justicia ordenase el archivo de las actuaciones derivadas del fallecimiento de Launding.
Sonko fue trasladado al cementerio de Santa Catalina de la ciudad autónoma y enterrado como un número. Otros compañeros en el bosque de Ben Younes, próximo a Ceuta, habían guardado algunas de sus pertenencias. Entre ellas, había unas pulseras y la carta de inscripción consular. Con ese documento se logró poner nombre y apellidos a la víctima. Tras diversas averiguaciones se contactó con su familia en Senegal y con otros familiares residentes en Almería.
Sonko no estaba solo aquella madrugada del 26 de septiembre de 2007, las tres personas que le acompañaban, dos hombres jóvenes y una mujer de cincuenta y dos años, fueron deportadas al desierto, en la zona de Argelia, tras ser detenidas por las autoridades marroquíes. Así, se perdían los testigos de un hecho delictivo.
Buscarles no fue fácil pero no hubo ninguna dificultad en que colaborasen en dar su testimonio sobre los hechos, mostrando una gran valentía y solidaridad con su compañero muerto.
El relato de los testigos y también víctimas de tortura, daba luz a lo que había sucedido esa madrugada.
“El barco que nos ha sacado del agua se ha dirigido hacia la costa marroquí. Los guardias nos han empujado al agua. Antes de ello, uno de los guardias ha sacado un cuchillo y pinchado los salvavidas de los hombres. El chico costamarfileño vomitaba porque estaba muy cansado y gritaba que por favor no le tiraran que quería pedir asilo, que era refugiado. En ese momento uno de los guardias civiles le ha dado un golpe en la nuca y también le han tirado al agua. El costamarfileño se las ha arreglado para llegar a la playa.
El senegalés gritaba que no sabía nadar, y gritaba constantemente que no sabía nadar, y los guardias le han tirado al agua y reían, parecía como si pensaran que todo era una broma. Al principio se ha agarrado a algo del barco, pero los guardias le han soltado del barco a la fuerza. Ya en el agua, el chico senegalés ha bajado y subido a la superficie tres veces y a la tercera ya no gritaba y entonces uno de los guardias, se ha tirado al agua para sacarle.
Ya en la costa, en el lado marroquí de Ben Youness, estábamos los cuatro en la playa. El costamarfileño había perdido el conocimiento por el esfuerzo y estaba medio ahogado. El senegalés estaba muerto.
La gendarmería marroquí se ha quedado con nosotros pero le ha dicho a la Guardia Civil que el muerto era de ellos, que ellos lo habían provocado.
Del lado español ha llegado la ambulancia. La guardia civil ha abierto la puerta de la frontera y dos camilleros han entrado unos metros, dos guardias han metido al senegalés sobre la camilla y le han transportado hasta la ambulancia española junto con los guardias.
Hemos pasado tres días en el puesto de la gendarmería a unos cincuenta kilómetros de Tánger, después nos han tirado a la frontera de Argelia”.
Después de identificada a la víctima y obtenidas las pruebas, la profesionalidad, la paciencia y el tesón del gran abogado Alberto Revuelta han hecho ver la luz de la justicia después de cuatro años. Mostrando así que el trabajo con migrantes debe salir del asistencialismo, tan cómodo para el Estado, y asentarse en la lucha por los derechos humanos y la recuperación de la ciudadanía.
Las fronteras no pueden ser territorios sin ley de nuestra monarquía bananera. En Ceuta y en Melilla debe aplicarse la ley de procedimiento administrativo de negación de entrada y respetarse los Convenios Internacionales firmados por el Estado español.
Esperemos que esta condena sirva de precedente y logre frenar las vulneraciones diarias de derechos que se producen allí donde es fácil hacer desaparecer a las víctimas.

sábado, 25 de febrero de 2012

Pastoral Obrera en Sevilla califica la situación actual de inmoralidad radical



“Un sistema laboral, a todas luces inhumano e injusto”
Muestra su indignación por la precariedad y la “cosificación” de los trabajadores
Hace un llamamiento a “realizar cuántas acciones sean necesarias para visibilizar las injusticias y manifestar nuestra oposición a las mismas”
Comunicado de la delegación de pastoral obrera de Sevilla
La Delegación Diocesana de Pastoral Obrera ha emitido un comunicado al término de la jornada diocesana celebrada el pasado fin de semana, en el que muestra su indignación por la precariedad, la “cosificación” de los trabajadores, la desmesurada ambición de los más ricos, la conversión del trabajo en “ocasión de explotación”, y la sumisión de los gobernantes “a los intereses egoístas de una racionalidad económica que acaba por hacer inviable la existencia humana”.
“No pasar de largo ante el sufrimiento ajeno”
En este comunicado se lamenta también “la miseria creciente a la que se condena a tantas familias, por medio de un sistema económico y laboral, a todas luces inhumano e injusto”. La Delegación deja patente su intención de “no pasar de largo ante el sufrimiento ajeno. Lo hacemos -se añade en el comunicado- como Iglesia samaritana en medio del mundo obrero y del trabajo”.
En esta situación, la Delegación convoca a toda la comunidad cristiana a “sanar al hombre y mujer heridos por este sistema económico y cultural en lo más hondo de su ser: levantando al caído, acompañando al que ha perdido su horizonte de vida, compartiendo con los empobrecidos nuestros bienes, ayudando a reincorporarse al camino a cuantos quedan en las cunetas, y generando espacios de comunión y humanización”.
Seguidamente, hace un llamamiento a “anunciar la vida nueva revelada por Jesucristo que tiene como clave fundamental el Amor de Dios que exige la comunión y se realiza en la justicia, poniendo de manifiesto cómo el plan de Dios coincide con el bien del hombre, a través del testimonio de vida cotidiano de nuestras comunidades cristianas”.
En el comunicado se propone una denuncia, “con la claridad y la contundencia de la Doctrina Social de la Iglesia y del Evangelio de Jesucristo”, de lo que califican como “inmoralidad radical de la situación actual”, y se hace un llamamiento a “realizar cuántas acciones sean necesarias para visibilizar las injusticias y manifestar nuestra oposición a las mismas”.

Job y Jesús de Nazaret, indignado


Juan José Tamayo, teólogo

Éste es el primero de una serie de artículos que sobre el mismo tema escribe Juan José Tamayo. Los próximos artículos llevarán estos titulos:1. Jesús indignado “con el poder político”. 2. “con el poder económico”. 3 “Con el poder religioso”. 4. “Con el poder patriarcal. 5 “Con Dios”. (Redacción de R. C.)
El movimiento de los Indignados ha logrado implicar a jóvenes pertenecientes a diferentes movimientos cristianos comprometidos con la justicia y la liberación: Jóvenes Obreros Cristianos (JOC), Jóvenes Estudiantes Cristianos (JEC), Jóvenes de acción Católica (JAC), Comunidades de Base, Cristianos por el Socialismo, Movimiento de Apostolado Seglar (MAS), Comités de Solidaridad, etc.
Todos ellos se encuentran entre los participantes y convocantes de las movilizaciones contra la tiranía de los mercados, los déficits democráticos y en defensa de una democracia participativa, económica, intercultural e interétnica, sin exclusiones por razones de género, clase social, procedencia geográfica, religión, cultura, etc.
Tienen poderosas razones éticas, políticas, económicas y sociales para movilizarse y solidarizarse con los Indignados, ya que están viviendo las consecuencias de la crisis y de las políticas represivas, el cierre de todo horizonte laboral y la negación de
los más elementales derechos y libertades.

Pero, hay otra razón, que no niega las anteriores, sino que las refuerza y radicaliza para participar en las acciones populares de protesta: Jesús de Nazaret, crucifi cado por las autoridades religiosas y políticas por comportarse indignadamente
Durante las últimas décadas viene produciéndose un cambio verdaderamente revolucionario en torno a la persona de Jesús, el que se refiere a la manera de entender la actitud de Jesús ante el conflicto en sus diferentes niveles: religioso,
político, social, teológico, etc.

El cambio es muy similar al que se ha producido en torno a otra figura de la Biblia judía: Job. La imagen del jeque idumeo que se nos transmitió, resultaba de la lectura del prólogo y del epílogo del libro que lleva su nombre y que lo presentaban como una persona resignada ante los diferentes reveses de fortuna.
Esa imagen se resumía en la reacción sumisa de Job cuando pierde todos sus bienes: “¡Yahvé me lo ha dado, Yahvé me lo ha quitado. Bendito sea el nombre de Yahvé” (Job 1, 21), y en el comentario del autor del libro: “A pesar de todo, Job no pecó ni imputó nada indigno
a Dios” (Job 1, 22).

Recuerdo todavía la reacción de mi madre ante mis travesuras que
con razón le sacaban de quicio: “Hijo, contigo hay que tener más paciencia que el santo Job.
Sin embargo, el conocimiento del conjunto el libro nos descubre otra imagen de Job, que poco o nada tiene que ver con la del prólogo y la del epílogo. Es el Job impaciente que descubrí ya en mi juventud leyendo el excelente libro de J. Mª Cabodebilla, La impaciencia de Job, y que estoy releyendo ahora con verdadera fruición.

Con quien nos encontramos es con un Job rebelde, que osa litigar con Dios y poner en cuestión la doctrina tradicional de la retribución y, por ende, la justicia divina. Es un Job crítico, indignado por igual con Dios y con quienes pretenden salvar el honor de Dios; un Job que se adelanta en casi veinte siglos a los críticos modernos de la teodicea y pone en aprietos a Dios cuando le interroga por las razones de su comportamiento tan arbitrario.

Bloch lo define muy certeramente como el “Prometeo hebreo”, que pone en cuestión el orden del mundo.
Tres amigos van a consolarle y a convencerle de que tiene merecido el castigo por sus pecados, al tiempo que pretenden demostrar la justicia y equidad de Dios, exculparle de toda responsabilidad en los males que padece y defenderlo con argumentos desmentidos por los hechos.

Sin embargo, en ningún momento muestran el más mínimo ápice de compasión ante su desgracia.
Hay un momento en que la indignación de Job sube de tono, cuando maldice el día que nació: “Muera el día en que nací, la noche en que anunció: ‘¡Ha sido concebido un varón!’.

Que ese día se vuelva tinieblas, que Dios, desde lo alto, no lo eche en falta, que la luz no brille sobre él… ¿Por qué no morí antes de nacer o salí del vientre ya cadáver? ¿Por qué me recogerían dos rodillas, dos pechos para amamantarme?…

Como aborto ignorando, no existiría, como niño que no llega a ver la luz” (Job, 3, 1ss).
De Jesús se predicó siempre, como de Job, la paciencia, la aceptación de la voluntad de Dios, el acatamiento de las leyes judías y la sumisión al orden religioso y político vigente. Esa es, en buena medida, la imagen de Jesús que Nietzsche ofrece en El Anticristo: “Él no opone resistencia, ni con palabras ni en el corazón, a quien es malvado con él… No se encoleriza con nadie, ni menosprecia a nadie. No se deja ver en los tribunales, ni se deja citar ante ellos (“no jurar”)…

Lo que él legó a la humanidad es la práctica: su comportamiento ante los jueces, ante los sayones, ante los acusadores, ante toda especie de calumnia y burla su comportamiento en la cruz… Él ora, sufre, ama con quienes, en quienes le hacen el mal. No defenderse, no encolerizarse, no hacer responsable a nadie…” (El Anticristo. Maldición sobre el cristianismo, Alianza, Madrid, 1974, parágrafos 33 y 35, pp. 63. 65).

En esto no puedo estar de acuerdo con Nietzsche. Jesús fue un Indignado, que estuvo en permanente conflicto con el orden establecido.
Se comportó como un ciudadano en rebeldía, como un creyente insumiso. La indignación y el conflicto caracterizaron su personalidad, su modo de ser y de vivir. Ambas constituyen la opción fundamental de su vida, el principio ético que guía su práctica liberadora y la razón de su trágico final. Lo demostraremos en los artículos siguientes.
JUAN JOSÉ TAMAYO
Director de la Cátedra de Teología de la Universidad Carlos III de Madrid
23 de febrero de 2012 Núm. 3.934 (291) ESCUELA 3

JOSE ANTONIO PAGOLA PRIMERO CUARESMA 2012



Marcos presenta la escena de Jesús en el desierto como un resumen de su vida. Señalo algunas claves. Según el evangelista, «el Espíritu empuja a Jesús al desierto». No es una iniciativa suya. Es el Espíritu de Dios el que lo desplaza hasta colocarlo en el desierto: la vida de Jesús no va a ser un camino de éxito fácil; más bien le esperan pruebas, inseguridad y amenazas.
Pero el «desierto» es, al mismo tiempo, el mejor lugar para escuchar, en silencio y soledad, la voz de Dios. El lugar al que hay que volver en tiempos de crisis para abrirle caminos al Señor en el corazón del pueblo. Así se pensaba en la época de Jesús.
En el desierto, Jesús «es tentado por Satanás».(LEER EL EVANGELIO) Nada se dice del contenido de las tentaciones. Sólo que provienen de «Satanás», el Adversario que busca la ruina del ser humano destruyendo el plan de Dios. Ya no volverá a aparecer en todo el evangelio de Marcos. Jesús lo ve actuando en todos aquellos que lo quieren desviar de su misión, incluido Pedro.
El breve relato termina con dos imágenes en fuerte contraste: Jesús «vive entre fieras», pero «los ángeles le sirven». Las «fieras», los seres más violentos de la creación, evocan los peligros que amenazarán siempre a Jesús y su proyecto. Los «ángeles», los seres más buenos de la creación, evocan la cercanía de Dios que bendice, cuida y defiende a Jesús y su misión.
El cristianismo está viviendo momentos difíciles. Siguiendo los estudios sociológicos, nosotros hablamos de crisis, secularización, rechazo por parte del mundo moderno… Pero tal vez, desde una lectura de fe, hemos de decir algo más: ¿No será Dios quien nos está empujando a este «desierto»? ¿No necesitábamos algo de esto para liberarnos de tanta vanagloria, poder mundano, vanidad y falsos éxitos acumulados inconscientemente durante tantos siglos? Nunca habríamos elegido nosotros estos caminos.
Esta experiencia de desierto, que irá creciendo en los próximos años, es un tiempo inesperado de gracia y purificación que hemos de agradecer a Dios. El seguirá cuidando su proyecto. Sólo se nos pide rechazar con lucidez las tentaciones que nos pueden desviar una vez más de la conversión a Jesucristo.

TENTACIONESNo le resultó nada fácil a Jesús mantenerse fiel a la misión recibida de su Padre, sin desviarse de su voluntad. Los evangelios recuerdan su lucha interior y las pruebas que tuvo que superar, junto a sus
discípulos, a lo largo de su vida.
Los maestros de la ley lo acosaban con preguntas capciosas para someterlo al orden establecido, olvidando al Espíritu que lo impulsaba a curar incluso en sábado. Los fariseos le pedían que dejara de aliviar el sufrimiento de la gente y realizara algo más espectacular, "un signo del cielo", de proporciones cósmicas, con el que Dios lo confirmara ante todos.
Las tentaciones le venían incluso de sus discípulos más queridos. Santiago y Juan le pedían que se olvidara de los últimos, y pensara más en reservarles a ellos los puestos de más honor y poder. Pedro le reprende porque pone en riesgo su vida y puede terminar ejecutado.
Sufría Jesús y sufrían también sus discípulos. Nada era fácil ni claro. Todos tenían que buscar la voluntad del Padre superando pruebas y tentaciones de diverso género. Pocas horas antes de ser detenido por las fuerzas de seguridad del templo Jesús les dice así: "Vosotros sois los que habéis perseverado conmigo en mis pruebas"(Lucas 22,28).
El episodio conocido como "las tentaciones de Jesús" es un relato en el que se reagrupan y resumen las tentaciones que hubo de superar Jesús a lo largo de toda su vida. Aunque vive movido por el Espíritu recibido en el Jordán, nada le dispensa de sentirse atraído hacia formas falsas de mesianismo.
¿Ha de pensar en su propio interés, o escuchar la voluntad del Padre? ¿Ha de imponer su poder de Mesías, o ponerse al servicio de quienes lo necesitan? ¿Ha de buscar su propia gloria, o manifestar la compasión de Dios hacia los que sufren? ¿Ha de evitar riesgos y eludir la crucifixión, o entregarse a su misión confiando en el Padre?
El relato de las tentaciones de Jesús fue recogido en los evangelios para alertar a sus seguidores. Hemos de ser lúcidos. El Espíritu de Jesús está vivo en su Iglesia, pero los cristianos no estamos libres de falsear una y otra vez nuestra identidad cayendo en múltiples tentaciones.
Identificar hoy las tentaciones de la Iglesia y de la jerarquía, de los cristianos y de sus comunidades; hacernos conscientes de ellas como Jesús; y afrontarlas como lo hizo él, es lo primero para seguirle con fidelidad. Una Iglesia que no es consciente de sus tentaciones, pronto falseará su identidad y su misión. ¿No nos está sucediendo algo de esto? ¿No necesitamos más lucidez y vigilancia para no caer en la infidelidad?
 


LEER

jueves, 23 de febrero de 2012

Primavera valenciana


ATRIO

¡Ojalá de Valencia -sede física de Atrio- salga algo más que noticias sobre corrupción y sobre el voto masivo a la derecha, a pesar de todo! La bola de indignación frente a los recortes y la desmesurada acción policial empezó en un emblemático Instituto de Educación Secundaria, el que lleva el título del gran humanista valenciano Luis Vives. Cuenta el inicio de la protesta y da datos sobre su contexto la escritoraLucía Etxebarria, una valenciana universal, como Luis Vives, muy sensible a todas las injusticias, cuya última actualización en Facebook reproducimos a continuación.
Actualización de estado
De Lucía Etxebarria
Los valencianos han pagado con sus impuestos los siguientes despilfarros inútiles :
  • 760.880.921 euros = el edificio de la ciudad de Ciudad de las Artes.
  • 1.500.000.000 euros = America’s Cup. solo tuvo una audiencia del 4% de share
  • 100.000.000 euros = Formula 1.
  • 100.000.000 euros =La visita del Papa en 2006
  • 400.000.000 euros = El nuevo Mestalla. para el Valencia club de futbol (entidad privada), cuando está a punto de quebrar la entidad
  • 113.000.000 euros=Open de Tenis. que todas las ciudades han desechado
  • 2.000.000 euros = Plaza cubierta. en Xativa
  • 4.000.000 euros = Campaña A favor del trasvase.
  • Subvención anual de la Televisión Valenciana: 130 millones de euros. Todo el cine español recibe al año 70 millones de euros.15000 personas trabajan allí, más personal que en Telecinco. Pagó 500.000 euros para estrenar ‘La piel que habito’ y a continuación la vendió a Telecinco para que la emita antes por 150.000 euros. ( Es decir, el directivo se quedó con la pasta restante, a todas luces)
  • 15.000.000.000 euros : Deuda de la comunidad Valenciana
Pero no había dinero para que los menores valencianos pudieran estudiar en edificios y no en barracones. Para que pudieran estudiar sin tener que ir con mantas a un instituto sin calefacción y con goteras
  • Cuando un chico sacó un vídeo de la situación, en la que se veía a los estudiantes tomar apuntes cubiertos por mantas, se le expulsó del instituto. Los alumnos pues decidieron salir a la calle a protestar y reclamar una educación digna.
  • Como respuesta, se les envió un operativo policial más potente que el enviado a Sol en las protestas del 11 M.
  • Se agredió a menores que se habían manifestado pacificamente. Están corriendo videos en los que se ve como la policía agrede a dos niñas y a un niños que no estaban haciendo nada, que simplemente estaban quietos.´
La Comunidad Valenciana es la segunda autonomía con más fracaso escolar. Ha empeorado en 14,4 puntos en el período 2000-20006 y sólo está por detrás de Ceuta.
Además EL País Valencià es la comunidad autónoma que más desatiende su sistema sanitario. Según el informe de la Federación de Asociaciones en Defensa de la Sanidad Pública (Fadsp) en su último informe sobre Los servicios sanitarios de las comunidades autónomas 2010.
Por supuesto, la televisión autonómica valenciana ( repito : Subvención anual de la Televisión Valenciana: 130 millones de euros. Todo el cine español recibe al año 70 millones de euros) no informa de esto
La policía ha realizado más detenciones en Valencia en la protesta estudiantil de los últimos días que en las movilizaciones registradas en el último año, en el resto de España ( manifestaciones del 15M y contra r los recortes presupuestarios) Ha habido 38 detenciones, ocho detenidos menores.
El jefe superior de Policía de Valencia, Antonio Moreno, se ha negado a explicar cuántos efectivos policiales ha desplegado porque no piensa “proporcionar esa información al enemigo”. Si tu enemigo es un crío cuya arma es una mochila, tienes un problema.
Se supone que los estudiantes han alterado el orden público. No ha habido quemas de contenedores, ni un escaparate roto, ni un cristal rajado.
La delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Paula Sánchez de León, que ha presentado al responsable policial y no ha intervenido hasta que han terminado las preguntas para expresar su deseo de que los incidentes queden “como un anécdota que no se vuelva a repetir”.
Tú, votante de derechas, que eres católico ¿ Quieres que hablemos del mensaje de Cristo? ¿ Es esto ayudar al desfavorecido? ¿ Es esto sostener el mensaje cristiano de la genenerosidad y la no violencia?
En los evangelios, Jesús nos habla de los niños o nos pone en sus ejemplos a los niños : “El que recibe a este niño en mi Nombre me recibe a mí, y el que me recibe a mí recibe a Aquel que me envió” Lc 9, 46-50 ¿ De verdad te puedes decir católico y justificar la agresión a menores que, repito, no han roto un cristal, no han quemado un contenedor, no han destrozado un escaparate, sino que se limitaban a reclamar una escuela con calefacción y sin goteras, escuela que podrían haber tenido si el dinero de los impuestos de los valencianos se hubiera destinado a lo que se supone que se destina y no a fastos faraónicos que benefician – mucho- a muy pocos ?

No acato, ni respeto un escándalo supremo


Gaspar Llamazares Trigo

La condena anunciada del Tribunal Supremo al juez Garzón pone en evidencia la politización corporativa del poder judicial.
El linchamiento o juicio inquisitorial a Garzón resume, como pocos, nuestros males nacionales, en este caso, las aberraciones del poder que se convierten en afrentas a la ética civil y la justicia.
La condena anunciada del Tribunal Supremo pone en evidencia la politización corporativa del poder judicial.
El primero de ellos es la soberbia y prepotencia clasista de los que se consideran todavía hoy vencedores de la guerra civil y luego también de la interpretación de la transición. Los que no están dispuestos a que nadie cuestione, revise o interprete el pasado: ni de la impunidad, ni de las leyes, como ha hecho con el caso de las víctimas del franquismo, Baltasar Garzón. A él se le podía permitir sacar a la luz los trapos sucios de las “dictaduras bananeras”, pero ni hablar de sacar los colores a la Metrópoli del Imperio ¡Aquí somos más serios, aquí la impunidad del franquismo no se toca!
Se trata también de un juicio que simboliza el conflicto entre las Instituciones del Estado
La utilización burda de la Ley de Amnistía como ley de punto final y el menosprecio de derecho internacional en materia de Derechos Humanos reanuda la apropiación de la Constitución por los sectores que más la combatieron.
El segundo es un mal, tan viejo como el mundo, la codicia, que extiende un manto de silencio sobre la ominosa corrupción que durante décadas y, con pasividades y complicidades de muchos, se ha enseñoreado de nuestro sistema económico y social (especulación urbanística y financiera) y de nuestra clase política, contaminando “a todas” las Instituciones del Estado. La codicia de los plutócratas del Estado. Los Gürtel, Palma Arena y demás resumen la corrupción ramplona y una exhibición hortera por parte de empresarios, políticos y demás corte de los milagros.
Por ello, la defensa sin matices del derecho de defensa, interpretada como inmunidad de los despachos de abogados, deja inermes a los jueces en su lucha contra el delito de guante blanco.
El tercero de los males es muy nuestro, tan nuestro como la envidia. Envidia del éxito del juez Garzón que se puede permitir organizar cursos en el centro del imperio. Envidia de su valentía y de su trabajo, mientras otros dormitan a la sombra de los viejos muros de la Audiencia. Envidia de su soltura para mantener la profesionalidad y opinar políticamente. Envidia de su compromiso con las causas justas. Envidia de su imán mediático, de sus contactos internacionales, incluso de sus errores, de todo.
Pero envidia también transformada en rencor corporativo e institucional. Se trata también de un juicio que simboliza el conflicto entre las Instituciones del Estado. Un juicio al papel político y mediático en la lucha antiterrorista, a la persecución internacional de los crímenes contra la humanidad, y luego en la lucha contra el crimen organizado y la corrupción. Un rencor supremo, una ira sorda. Por eso no es casual que todo empiece por las escuchas. Un debate jurídico transformado en un juicio por prevaricación. Una patología suprema.
Una factura también al papel de Garzón en la lucha antiterrorista, por parte de los mismos que le jalearon antes, y que no perdonan ahora su papel comprometido ante la opinión pública en el intento fallido de proceso de paz. Había que abortarlo y con la ayuda de los bárbaros de ETA se abortó, y ahora se trata de eliminar a todos sus actores “simbólicamente”.
¡Qué mejor forma de meterle mano ante la opinión pública que un juicio a sus supuestas extralimitaciones en materia de garantías! ¡Qué mejor forma de linchar a Garzón que cuestionando su compromiso con los derechos humanos! Una jugada maestra.
Nunca un tribunal tan alto pudo volar más bajo. Un esperpento, tan nuestro. ¡Una vergüenza nacional!
Y una estrategia también suprema donde se coordinan los tiempos, los temas y los actores. Todo ello encaminado a una crónica de una condena anunciada. La condena del juez Garzón, es la condena una vez más, de las víctimas de los juicios franquistas a la luz de las leyes de la transición, utilizadas como ley del silencio.
La condena también de la persecución penal internacional y del papel de la Audiencia Nacional en materia de derechos humanos. La condena del éxito de un juez mediático y polémico para que todo vuelva a la normalidad de los grises muros como diría García Lorca.
Pero también una factura atrasada de la política que no perdona. De la derecha y una llamada izquierda que comparten las razones y los pecados de la soberbia y la codicia. De una parte también de la izquierda que no olvida las viejas afrentas, ni las nuevas ambiciones.
En el fondo también la vieja aspiración a constituir al Tribunal Supremo y el Tribunal Constitucional en una suerte de tercera Cámara que vigile y castigue los excesos de la política: el Estatut de Catalunya o el proceso de paz.
Una politización judicial que ha crecido al calor de la judicialización de la política, que junta extraños compañeros en el Consejo General del Poder Judicial y que desde ahí se extiende como una mancha de aceite. Despolitizando la justicia mediante el corporativismo conservador. Desjudicializando la justicia, degradando y privatizando el servicio público. Despolitizando la política al servicio de los mercados.
Todo junto se explica, pero todos juntos, estos juicios en cadena como bombas de racimo son una infamia. Nunca un tribunal tan alto pudo volar más bajo. Un esperpento, tan nuestro. ¡Una vergüenza nacional! ¡Un escándalo internacional!
Las injusticias que se comenten con la cobertura del derecho no deben ser ni respetadas, ni acatadas, precisamente en aras de la justicia. Como en el caso Dreyfus la justicia española, situada entre la verdad y el prestigio corporativo, ha preferido lo último, quedándose sin verdad y sin prestigio.
Es necesario que junto al legítimo derecho que asiste al juez Garzón para recurrir a todas las instancias se produzca un amplio movimiento en pro de la democratización profunda del poder judicial, así como del desarrollo social de la justicia como servicio público, a partir de la demanda de verdad y justicia para las víctimas del franquismo.
Porque el futuro está en la memoria ofendida de nuestros abuelos y el sentido de sus luchas, tanto como en la rebeldía de nuestros hijos.

martes, 21 de febrero de 2012

Foro de Curas de Madrid- CRISLAM


“Santiago y abre España”: Manifiesto en defensa del apóstol Santiago
Foro de Curas de Madrid- CRISLAM (intelectuales cristianos y musulmanes españoles)

Presentación
Hoy en día, cuando el diálogo interreligioso en general y el islamo-cristiano en particular es uno de los grandes desafíos del presente, cuando el encuentro de culturas está creando la fraternidad de los creyentes en torno a la paz y a la justicia, parece un contrasentido mantener en nuestros templos un signo que es un símbolo que hiere profundamente e impide la emergencia de una nueva conciencia para la humanidad de nuestros días. Nos referimos a la imagen incomprensible y aberrante del Santiago Matamoros subido a caballo, espada en mano.
El problema no es de hoy, como sabemos, el propio Sancho Panza, paradigma del sentido común, preguntaba a su señor Don Quijote: Querría que vuesa merced me dijese qué es la causa por que dicen los españoles cuando quieren dar una batalla invocando aquel San Diego Matamoros: “Santiago y cierra España”. A lo que Don Quijote, con hondo conocimiento de la realidad social y espiritual de nuestro pueblo, responde: Simplicísimo eres Sancho y mira que este caballero de la cruz bermeja háselo dado Dios a España por patrón y amparo suyo, especialmente en los rigurosos trances que con los moros españoles ha tenido, y así invocan y llaman como defensor suyo en todas las batallas que acometen, y muchas veces le han visto visiblemente en ellas, derribando, atropellando, destruyendo y matando los agarenos escuadrones (El Quijote. Espasa Calpe Madrid 1981, p.374).
Durante siglos el pueblo cristiano, con la bendición de sus jerarcas y sin el menor sobresalto espiritual, ha perpetuado ese gesto de violencia y muerte esculpiendo y pintando la imagen del Santo ecuestre en imágenes, retablos y fachadas de templos en donde celebraban el culto cristiano grabando así en los ojos, en la sensibilidad y en la conciencia de millones de fieles la normalidad y hasta ejemplaridad de dicho sacrílego gesto, cloroformando nuestra conciencia cristiana durante siglos, viendo como cosa normal matar a otros seres humanos porque eran de otra religión que la nuestra.
Nos empuja a escribir el siguiente manifiesto el texto luminoso fraterno y conciliador del Vaticano II: “Si en el transcurso de los siglos surgieron no pocas desavenencias y enemistades entre cristianos y musulmanes, el Sagrado Concilio exhorta a todos a que, olvidando lo pasado, procuren sinceramente una mutua comprensión, defiendan y promuevan unidos la justicia, los bienes morales, la paz y libertad para todos los hombres” (Nostra Aetate, nº3). El objetivo es colaborar a la conciencia que se encuentra en trance de surgir para una nueva humanidad.
Manifiesto en defensa del apóstol Santiago
Es hora de limpiar la memoria
* Desde la sensibilidad social y espiritual de nuestro tiempo, como sacerdotes católicos e intelectuales cristianos y musulmanes españoles integrados en CRISLAM (cristianismo e islam) manifestamos vergüenza y rechazo hacia todo tipo de violencia ejercida en nombre de cualquier religión y, hoy en concreto, hacia algunas imágenes que presiden o acompañan la liturgia en muchas iglesias católicas de España. Sobre todo, la imagen de un apóstol Santiago aplastando a enemigos moros que se retuercen bajo las patas de su caballo.
* Es hora de superar contradicciones y dudas ante la pretendida justificación de que se trata de una manifestación cultural y artística que está presente desde hace siglos y, hasta ahora, no ha sido objeto de rechazo ni escándalo, al igual que sucede con otros iconos crueles o racistas que conforman nuestra historia.
* La imagen de Santiago Matamoros es incompatible con la del apóstol que inspira el Camino de Santiago y que se identifica como un pacífico peregrino portador de fe y cultura.
* Por todo ello, reprobamos la presencia de estas imágenes en el espacio donde se celebra la Eucaristía y pedimos que, donde sea posible, se retiren a algún almacén o museo donde queden como vestigios históricos o representaciones artísticas.
* Consecuentes con el espíritu y la letra del Vaticano II, especialmente en el nº 3 de “Nostra Aetata”, pedimos a la Conferencia Episcopal Española que tome cartas en este asunto de Santiago Matamoros y, para mejor hacer comprender al pueblo cristiano cuanto aquí pedimos como sacerdotes católicos y grupo de intelectuales cristianos y musulmanes españoles, escriba un pequeño texto explicando el sentido de estas reformas. Sería la mejor batalla de Santiago, Apóstol de Cristo y peregrino de la fe.
* Finalmente, conforme al mensaje religioso más genuino del cristianismo y del islam, profundamente humanista e integrador (“que todos sean uno”, Jn 17, 21; “no cabe coacción en religión”, Corán 2,256), denunciamos todo gesto de enemistad, división y violencia que se pretenda justificar en nombre de dichas confesiones religiosas.

Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera


Manolo Semper, HOAC Alicante

Estamos en febrero del 2012. Los trabajadores, los ciudadanos de este país, llevamos un principio de año muy duro. Más de 5 millones de parados, casi el 50% de los jóvenes en desempleo, Familias completas sin recursos; recortes drásticos en pilares fundamentales del estado de bienestar como son educación, sanidad o servicios sociales; reducciones salariales y en derechos laborales de los empleados públicos, aplazamientos en la atención a la dependencia, impagos y cierres a las entidades que atienden a sectores de la población más desfavorecida; abandono de la cooperación internacional, etc.
Este es el plan de ajuste que el gobierno central, autonómico y local, ha impuesto para gastar menos y recaudar más, siguiendo los patrones de Bruselas, de Alemania, del FMI, en definitiva, de los mercados.
Recortes en todo, que directa o indirectamente afecta a todos: es la sociedad la que se empobrece. Y es la forma de expulsar a las personas del mercado laboral a la pobreza y a la exclusión social.
Mientras tanto las entidades financieras están recibiendo fondos públicos en unas cantidades escandalosas que bien podrían erradicar el hambre en el mundo (que para eso no hay dinero). Lo hacen para satisfacer el hambre insaciable del poder financiero, su avaricia sin límites. Quieren “sanear la banca” sin que después revierta nada en créditos ni en ayudas a la población. Es ”quitarles el dinero a los pobres para dárselo a los ricos”. Dicen que quieren crear empleo, facilitando más los despidos. Siguen recortando derechos sociales y laborales, que tanto ha costado conseguirlos, como pretenden ahora con la reforma laboral.
En este fraude que llaman crisis, el dominio cultural del capital es casi total, como lo es en lo económico. A los trabajadores y a las clases populares, muy debilitadas, solo nos queda resistir y protestar, seguir luchando. Y también, crear espacios de solidaridad que expresen otro modo –no egoísta- de hacer la historia como lo ha hecho siempre el movimiento obrero. Y entre todos ir creando, aunque todavía muy subterráneo, porque después se vota mayoritariamente al PP, una corriente ciudadana que exige dignidad y respeto a los derechos humanos como lo representa el 15 M o las últimas movilizaciones sindicales contra los recortes.
Porque sabemos que otro mundo es posible, que no puede continuar este desorden establecido, esta mentira de sistema, Aunque ahora resulte difícil y sin ser ingenuos porque esto va a durar demasiado, apostamos otro mundo posible y necesario, más justo y más humano, como se abre camino todos los años la primavera a pesar de los fríos de febrero. Nosotros creemos en la vida y en un futuro mejor para todos y nos comprometemos junto con otros muchos a construirlo.
Pablo Neruda lo dice de una manera muy hermosa: “podrán costar todas las flores, pero no podrán detener la primavera”.
Hoy es 12 de febrero. En nuestros campos ya están los almendros en flor anunciando la primavera, diciéndonos que la fuerza de la naturaleza, es más fuerte que la dictadura de los mercados. La belleza de la primavera se abrirá paso en medio de tanta negrura que nos trae esta injusta economía. Y que esta crisis no nos recorte la esperanza y las ganas de luchar. Que nos corten la alegría (Benedetti).
Nosotros, la HOAC, que somos un movimiento de trabajadores cristianos, creemos que la vida vence a la muerte. Que la dignidad de las personas es más fuerte que la crisis, que la primavera se abre paso aunque no sepamos cómo. No queremos perder la esperanza, mañana sale de nuevo el sol. Tenemos un Dios bueno, que es Padre y Madre que cuida de todos. Lo creemos y lo proclamamos en Jesús de Nazaret que decía “Dichosos vosotros los pobres…”, “Ay de vosotros los ricos…” (Lc 6,20) “Está claro: no podéis servir a Dios y al dinero”(Mt 6,24). (Eclesalia Informativo autoriza y recomienda la difusión de sus artículos, indicando su procedencia).
Esperanza en tiempos difíciles. Ánimo compañeros.

manolosemper@gmail.com