FUNDADOR DE LA FAMILIA SALESIANA

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COLEGIO SALESIANO - SALESIAR IKASTETXEA

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BIENVENIDO AL BLOG DE LOS ANTIGUOS ALUMNOS Y ALUMNAS DE SALESIANOS BARAKALDO

ESTE ES EL BLOG OFICIAL DE LA ASOCIACIÓN DE ANTIGUOS ALUMNOS Y ALUMNAS DEL COLEGIO SAN PAULINO DE NOLA
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ATALAYA

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miércoles, 3 de octubre de 2018

Libres

col salome 2

Responsables de cuidar y hacer crecer la viña. De compartir la cosecha, de repartir trabajo y dicha... no dueños, nunca dueños. Todo se nos es dado y pensamos que tenemos derecho sobre ello por el esfuerzo... Pero siempre se nos da la oportunidad de caer en la cuenta de ello, de seguir trabajando, de seguir compartiendo... Algún día aprenderemos y seremos libres... de nosotros mismos.

https://youtu.be/sdH0s19IYEk
https://youtu.be/sdH0s19IYEk

Nos creemos los dueños de la viña
nos creemos que el esfuerzo garantiza en gran medida
los derechos sobre ella, y sus frutos de por vida
y ponemos muchas normas para que sirvan de guía…

Nos creemos los dueños de la vida
y pensamos que sabemos lo que Dios quiere, y un día
entenderemos que no hacemos nada de lo que El quería
pues saber vivir es no apropiarse de lo que otros necesitan…

LIBRES PARA AMAR Y CULTIVAR
LA TIERRA QUE A TODOS SE NOS DA
PARA COMPARTIR LOS FRUTOS PORQUE NO HACE FALTA MÁS
QUE LA FELICIDAD DEL OTRO PARA VIVIR EN LIBERTAD
PARA COMPARTIR LOS FRUTOS PORQUE NO HACE FALTA MÁS
QUE LA FELICIDAD DEL OTRO PARA VIVIR EN LIBERTAD

Nos creemos los dueños de los días
y pensamos que triunfar es lo que prima
que tener seguridad es garantía
de una vida sin sobresaltos ni heridas…

Nos creemos dueños de toda justicia
y cada falta cometida se castiga
sin aprender ni enseñar que el Amor, en realidad,
no conoce la venganza ni la ira…

LIBRES PARA APRENDER A VIVIR EN PAZ
SIN QUERER IMPONER NUESTRA VERDAD
RECIBIENDO UNA Y OTRA VEZ OTRA OPORTUNIDAD
DE SER LIBRES PARA AMAR Y CULTIVAR
RECIBIENDO UNA Y OTRA VEZ OTRA OPORTUNIDAD
DE SER LIBRES PARA AMAR Y CULTIVAR

Salomé Arricibita


Para descargar la canción pinche el siguiente enlace: Libres.mp3 y dele al botón derecho del ratón y guardar como...

El divorcio ayer y hoy

col cruz tome
En mi comentario, desarrollaré el siguiente esquema:
Ayer: El divorcio en el siglo I en la cultura mediterránea y la alternativa de Jesús de Nazaret.
Hoy: El divorcio en el siglo XXI en la cultura occidental y la propuesta de la “Amoris Laetitia”.
Conclusión: El amor gratuito y servicial; meta y camino antidivorcio.
¿Desde dónde escribo? Soy creyente laica. Vivo en matrimonio desde hace 43 años. He dedicado muchas horas de mi vida profesional a terapia de pareja. Colaboro en los “Cursos para Novios” desde hace diez años. Seguí con mucho interés los preparativos y desarrollo de los dos Sínodos de los obispos sobre la familia en la comunidad eclesial y en el mundo y doy gracias a Dios por la Exhortación Apostólica “Amoris Laetitia” del papa Francisco sobre el amor en la familia.
En el Evangelio de hoy, Marcos nos presenta a los fariseos haciendo a Jesús una pregunta difícil para ponerle a prueba. Es una pregunta sobre el divorcio. Si los fariseos hacen a Jesús esta pregunta-trampa es porque el divorcio era ya problemático en ese momento. El divorcio es muy problemático porque es muy importante para la persona. Preocupaba a la sociedad judía de entonces y nos sigue ocupando a nosotros ahora. El divorcio, como ruptura de una pareja humana, que se han unido por un amor que creían duradero y exclusivo, que se comprometieron con un proyecto vital común y descubren un día que la vida en pareja no es lo que soñaron, que la convivencia ha perdido sentido y se ha vuelto imposible, es un fracaso que acarrea muchos problemas. El divorcio ha sido y es un fracaso, un fallo, una herida en la evolución personal y de la pareja.
La pregunta de los fariseos a Jesús es sobre el derecho del varón al divorcio (Deut, 24). Solo el varón tendría ese derecho. En tiempos de Jesús el supuesto del que se parte es la desigualdad, a favor del varón, entre hombre y mujer. La mujer es propiedad del varón y tiene que estar sometida y dependiente del marido como de soltera lo estaba del padre. Contra esa desigualdad responde Jesús: “Al principio de la creación Dios creó al hombre a su imagen, a imagen de Dios los creó, varón y mujer los creó” (Gén 1, 27), y serán una sola carne (Gé, 2, 24). De modo que el hombre no debe separar lo que Dios ha unido”. Y luego “en casa” a los discípulos les matiza la respuesta dada a los fariseos “si uno se divorcia de su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra la primera. Y si ella se divorcia de su marido y se casa con otro comete adulterio”. Así Jesús defiende la igualdad de derechos y deberes en el hombre y en la mujer. La desigualdad es antievangélica.
Hoy, la igualdad entre el hombre y la mujer es un derecho y la libertad y la autonomía son valores irrenunciables de la persona con independencia del género. Hoy, ni la sumisión ni la resignación son coherentes con estos valores ni con nuestra cultura. De ahí la crisis del modelo tradicional de matrimonio. Este cambio antropológico-cultural exige la renovación de dicho modelo. Veamos cómo y en qué dirección.
Plan originario: El Señor Dios se dijo: “No está bien que el hombre esté solo, voy a hacerle alguien como él que le ayude” (Gén 2, 18). Dios crea al hombre y la mujer y ve que es bueno (Gén 1, 31). Ser hombre y mujer iguales pero diferentes es bueno. La unión en una sola persona (proyecto común) es bueno. La ayuda mutua y el amor contra la soledad es bueno. Desde estos orígenes el matrimonio cristiano se concibe como comunidad de vida y amor. Unión por amor entre dos personas iguales en dignidad, derechos y deberes. La finalidad es la ayuda muta, una comunidad de vida y de amor para que los hombres sean felices y colaboradores libres y responsables en la transmisión de la vida humana. Además para el cristiano el amor matrimonial es encarnación y manifestación del Dios a los hombres. El matrimonio es sacramento del amor de Dios. Dios ha creado al hombre y a la mujer para que para la felicidad. Todo lo demás es “dureza de corazón”. Y lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre ni la mujer (Deut 24). Igualdad de derechos y deberes en la pareja.
En el matrimonio el amor es origen, meta y camino. El ideal deseado y deseable es que este amor sea estable, duradero y exclusivo, solo a ti y para siempre. Es el ideal, el anhelo, al que la pareja humana tiende. A ese ideal se llega, o al menos te acercas, a través de un proceso coextensivo con la vida. La meta está clara pero el camino no es fácil, tiene dificultades y desafíos. Y para esa carrera hay que prepararse y usar todos los recursos disponibles que faciliten la tarea. El amor y la convivencia hay que “trabajarlos”. No se regalan.
El matrimonio es un banco de prueba de la madurez personal y del amor gratuito y servicial, propio y específico de la naturaleza humana. Por eso, a más madurez en esta variable, más felicidad. Y si este ideal no se alcanza o fracasa el amor, hay que buscar alternativas para que la persona sobreviva al fracaso y siga siendo humanamente plena y feliz. Todos tenemos derecho a una segunda oportunidad.
En la Exhortación Apostólica “Amoris Laetitia” del Papa Francisco se aborda el amor en familia en la sociedad actual y se proponen medidas de prevención y tratamiento para los desafíos que hoy tiene que afrontar el matrimonio cristiano. Entre ellas destaco:
Preparación al matrimonio: Curso prematrimonial. Más vale prevenir que curar. La mayoría de matrimonios son nulos de origen porque no saben lo que hacen. Falta de conocimiento y madurez. Catecumenado permanente.
Acompañamiento pastoral en las primeras etapas y en momentos de dificultad: La madurez y la felicidad son un proceso de realización personal y de pareja coextensivos con la vida en matrimonio.
Revisión de la Pastoral de divorciados vueltos a casar: Discernimiento acompañado. No bastan los principios universales. Necesidad de personalizar el hecho del fracaso en el amor matrimonial y búsqueda guiada de una alternativa exitosa.
Atención a la fragilidad (vulnerabilidad) humana. Llevamos un tesoro en vasijas de barro: el ideal está claro, el conseguirlo es problemático. Ante la posibilidad de fracaso, aplicación del Principio Misericordia.
Para cerrar: Es frecuente elegir como lectura en la celebración del sacramento del matrimonio el texto de 1 Cor, 13. Es una intuición genial porque es un texto “sapiencial”. Es el mejor resumen de cómo debería ser el amor en el matrimonio a base de: Generosidad, comprensión y fidelidad. Presenta el amor gratuito y servicial como meta y camino de la felicidad humana en el matrimonio.

Darse totalmente sería el ideal del matrimonio

col fraymarcos
Mc 10, 2-16
Sigue el evangelio en el contexto de la subida a Jerusalén y la instrucción a los discípulos. La pregunta de los fariseos, tal como la formula Mc no es verosímil, ya que el divorcio estaba admitido por todos. Lo que se discutía eran los motivos que podían justificar un divorcio. En el texto paralelo de Mt dice: ¿Es lícito repudiar a la mujer por cualquier motivo? Esto sí tiene sentido, porque lo que buscaban los fariseos era meter a Jesús en la discusión de escuela.
No podemos hablar de matrimonio sin hablar de sexualidad; y no podemos hablar de sexualidad sin hablar del amor y de la familia. Son los cuatro pilares del templo donde puede desarrollarse una verdadera humanidad. En las materias que más pueden afectar al progreso de lo específicamente humano, debemos aprovechar al máximo los últimos conocimientos de las ciencias humanas y no quedarnos anclados en visiones arcaicas, por muy espirituales que parezcan. Tampoco en esta materia hay verdades absolutas.
El matrimonio es el estado natural de un ser humano adulto. En el matrimonio se despliega el instinto más potente del hombre. Todo ser humano es por su misma naturaleza sexuado. Bien entendido que la sexualidad es algo mucho más profundo que unos atributos biológicos externos, pene o pecho. ¡Cuánto sufrimiento se hubiera evitado y se puede evitar aún si se tuviera esto en cuenta! La sexualidad es una actitud vital instintiva que lleva al individuo a sentirse varón o mujer y le permite desplegar la naturaleza característica de cada sexo.
La base fundamental de un matrimonio está en una adecuada sexualidad. Un verdadero matrimonio debe sacar todo el jugo posible de esa tendencia, humanizándola al máximo. La capacidad humana consiste en la posibilidad de darse al otro y ayudarle a ser él, sintiendo que en ese darse, encuentra su propia plenitud. En esta posibilidad de humanización no hay límites. Es verdad que tampoco los hay al utilizar la sexualidad para deshumanizarse. La línea divisoria es tan sutil que la mayoría de los seres humanos no llegan a percibirla.
La diferencia está, no en los actos en sí, sino en la actitud de cada persona. Siempre que se busca por encima de todo el bien del otro y es expresión de verdadero amor, la sexualidad humaniza a ambos. Siempre que se busca en primer lugar el placer personal, utilizando al otro como instrumento, es deshumanizadora. El matrimonio no es una patente de corso, en el cual todo está permitido. Estoy convencido de que hay más abusos sexuales dentro del matrimonio que fuera de él, pero he tenido que dejar de decirlo porque escandalizaba.
Hoy no tiene sentido hablar de matrimonio y sexualidad sin dejar claro lo que es el amor. Si una relación de pareja no está fundamentada en el verdadero amor, no tiene nada de humana. Pero lo realmente complicado es aquilatar lo que queremos decir cuando hablamos de amor. Se trata de una palabra tan manoseada que es imposible adivinar lo que queremos decir con ella en cada caso. Al más refinado de los egoísmos, que es aprovecharse de lo más íntimo del otro, también le llamamos amor. No es fácil descubrir lo que significa el amor.
El único enemigo del amor es el egoísmo. El afán de buscar en todo el beneficio propio y personal, arruina toda posibilidad de unas relaciones verdaderamente humanas. Esta búsqueda de otro para satisfacer las necesidades de mi ego, anula todas las posibilidades de una relación de pareja. Desde la perspectiva hedonista, la pareja estará fundamentada en lo que el otro me aporta, nunca en lo que yo puedo darle. La consecuencia es nefasta: las parejas solo se mantienen mientras se consiga un equilibrio de intereses mutuos.
Esta es la razón por la que más de la mitad de los matrimonios se rompen, sin contar los que hoy ni siquiera se plantean la unión estable sino que se conforman con sacar en cada instante el mayor provecho de cualquier relación personal. Desde estas perspectivas, por mucho que sea lo que una persona me está dando, en cualquier momento puedo descubrir a otra que me puede dar más. Ya no tendré motivos para seguir con la primera. También puede darse el caso de encontrar otra persona que dándome lo mismo, me exige menos.
El amor consiste en desplegar la capacidad de darse sin esperar nada a cambio. No tiene más límites que los que ponga el que ama. Aquel a quien se ama no puede poner los límites. Pero la superación del falso yo y el descubrimiento de mi auténtico ser es limitado y debo reconocerlo sin ambages. Debemos tomar conciencia clara de cuál es la diferencia entre el servicio y el servilismo. Jesús dijo que tan letal es el someter al otro como dejarse someter. Si la pareja ha superado mi capacidad de aguante, debo evitar que me someta y aniquile.
Desde nuestro punto de vista cristiano, tenemos un despiste monumental sobre lo que es el sacramento. Para que haya sacramento, no basta con ser creyente e ir a la iglesia. Es imprescindible el mutuo y auténtico amor. Con esas tres palabras, que he subrayado, estamos acotando hasta extremos increíbles la posibilidad real del sacramento. Un verdadero amor es algo que no debemos dar por supuesto. El amor no es puro instinto, no es pasión, no es interés, no es simple amistad, no es el deseo de que otro me quiera. Todas esas realidades son positivas, pero no son suficientes para el logro de mayor humanidad.
Cuando decimos que el matrimonio es indisoluble, nos estamos refiriendo a una unión fundamentada en un amor auténtico, que puede darse entre creyentes o no creyentes. Puede haber verdadero amor humano-divino aunque no se crea explícitamente en Dios, o no se pertenezca a una religión. Es impensable un auténtico amor si está condicionado a un limitado espacio de tiempo. Un verdadero amor es indestructible. Si he elegido una persona para volcarme con todo lo que soy y así desplegar mi humanidad, nada me podrá detener.
El divorcio, entendido como ruptura del sacramento, es una palabra vacía de contenido para el creyente. La Iglesia hace muy bien en no darle cabida en su vocabulario. No es tan difícil de comprender. Solo si hay verdadero amor hay sacramento. La mejor prueba de que no existió auténtico amor, es que en un momento determinado se termina. Es frecuente oír hablar de un amor que se acabó. Ese amor, que ha terminado, ha sido siempre un falso amor, es decir, egoísmo que solo pretendía el provecho personal interesado y egoísta.
Los seres humanos nos podemos equivocar, incluso en materia tan importante como esta. ¿Qué pasa cuando dos personas creyeron que había verdadero amor y en el fondo no había más que interés recíproco? Hay que reconocer sin ambages que no hubo sacramento. Por eso la Iglesia solo reconoce la nulidad, es decir, una declaración de que no hubo verdadero sacramento. Y no hacer falta un proceso judicial para demostrarlo. Es muy sencillo si en un momento determinado no hay amor, nunca hubo verdadero amor y no hubo sacramento.
Es muy corriente confundir el sacramento con el rito externo. Un sacramento es el resultado de la unión de un signo con una realidad significada. En este sacramento, el signo son las palabras que se dicen mutuamente los contrayentes. Lo significado es el verdadero amor. Si no hay amor, el signo que no significa nada, no es más que un garabato sin sentido. Puede haber verdadero amor sin sacramento. No puede haber sacramento sin auténtico amor. ¿Qué es lo que nos interesa? ¿que se quieran de verdad o la apariencia del rito externo?
El domingo pasado decíamos que en Dios todos estamos identificados. Lo que intenta el sacramento es que descubramos esta realidad y la vivamos de manera especial con la persona que elegimos para compartir nuestra vida. Esta es la razón por la que el matrimonio se le ha considerado sacramento, es decir, signo del Amor que es Dios, desplegado entre dos seres humanos. Podíamos identificarnos con cualquiera, pero elegimos una persona y en esa relación especial con ella, pretendemos desplegar toda nuestra capacidad de amar

El problema del divorcio

col sicre

La formación de los discípulos, a la que Marcos dedica la segunda parte de su evangelio, abarca aspectos muy diversos y no se atiene a un orden lógico. Si el domingo pasado se habló de amigos y enemigos, y del problema del escándalo, el evangelio de hoy se centra en el divorcio. El relato contiene dos escenas: en la primera, los fariseos preguntan a Jesús si se puede repudiar a la mujer y reciben su respuesta (2-9); en la segunda, una vez en la casa, los discípulos insisten sobre el tema y reciben nueva respuesta (10-12).
Advertencia previa
El evangelio de Mt, al contar este episodio, introduce un cambio fundamental: los fariseos no preguntan si «le está permitido al hombre separarse de su mujer», sino si «le está permitido separarse de su mujer por cualquier motivo. Con esto quieren que Jesús se decante entre dos escuelas rabínicas: la radical de Hillel, que solo acepta el divorcio en caso de adulterio, y la amplia de Shammay, que lo acepta por cualquier motivo. En Mc, el pasaje no tiene el sentido de debate entre escuelas.
Primera escena: los fariseos y Jesús.
La pregunta que le hacen resulta desconcertante, porque el divorcio estaba permitido en Israel y ningún grupo religioso lo ponía en discusión. Que el matrimonio es una institu­ción divina lo sabe cualquier judío por el Génesis, donde Dios crea al hombre y a la mujer para que se compenetren y complemen­ten. Pero el judío sabe también que los problemas matrimoniales comienzan con Adán y Eva. El matrimonio, incluso en una época en la que la unión íntima y la convivencia amistosa no eran los valores primordiales, se presta a graves conflictos.
Por eso, desde antiguo se admite, como en otros pueblos orientales, la posibilidad del divorcio. Más aún, la tradición rabínica piensa que el divorcio es un privilegio exclusivo de Israel. El Targum Palestinense pone en boca de Dios las siguientes palabras: «En Israel he dado yo separación, pero no he dado separación en las naciones»; tan sólo en Israel «ha unido Dios su nombre al divorcio».
La ley del divorcio se encuentra en el Deuteronomio, capítulo 24,1ss donde se estipula lo siguiente: «Si uno se casa con una mujer y luego no le gusta, porque descubre en ella algo vergonzoso, le escribe el acta de divorcio, se la entrega y la echa de casa...»
Llama la atención en esta ley su tremendo machismo: sólo el varón puede repudiar y expulsar de la casa. En la perspectiva de la época tiene su lógica, ya que la mujer se parece bastante a un objeto que se compra y que se puede devolver si no termina convenciendo. Sin embargo, aunque la sensibilidad de hace veinte siglos fuera distinta de la nuestra (tanto entre los hombres como entre las mujeres), es indudable que unas personas podían ser más sensibles que otras al destino de la mujer. Este detalle es muy interesante para comprender la postura de Jesús.
En cualquier caso, la ley es conocida y admitida por todos los grupos religiosos judíos. Por consiguiente, la pregunta de los fariseos resulta desconcertante. Cualquier judío piadoso habría respondido: sí, el hombre puede repudiar a su mujer. Pero Jesús, además de ser un judío piadoso, se muestra muy cercano a las mujeres, las acepta en su grupo, permite que le acompañen. ¿Estará de acuerdo con que el hombre repudie a su mujer? Así se comprende el comentario de Mc: le preguntaban «para ponerlo a prueba». Los fariseos quieren poner a Jesús entre la espada y la pared: entre la dignidad de la mujer y la fidelidad a la ley de Moisés. En cualquier opción que haga, quedará mal: ante sus seguidoras, o ante el pueblo y las autoridades religiosas.
La reacción de Jesús es tan atrevida como inteligente. Él también pone a los fariseos entre la espada y la pared: entre Dios y Moisés. Empieza con una pregunta muy sencilla que se puede volver en contra suya: “¿Qué os mandó Moisés?” Y luego contraataca, distinguiendo entre lo que escribió Moisés en determinado momento y lo que Dios proyectó al comienzo de la historia humana.
En el Génesis, Dios no crea a la mujer para torturar al varón (como en el mito griego de Pandora), sino como un complemento íntimo, hasta el punto de formar una sola carne. En el plan inicial de Dios, no cabe que el hombre abandone a su mujer; a quienes debe abandonar es a su padre y a su madre, para formar una nueva familia (1ª lectura).
Las palabras de Génesis 1,27 sugieren claramente la indisolubilidad: el varón y la mujer se convierten en un solo ser. Pero Jesús refuerza esa idea añadiendo que esa unión la ha creado Dios; por consiguiente, «lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre». Jesús rechaza de entrada cualquier motivo de divorcio.
La aceptación posterior del repudio por parte de Moisés no constituye algo ideal, sino que se debió a «vuestro carácter obstinado». Esta interpretación de Jesús supone una gran novedad, porque sitúa la ley de Moisés en su contexto histórico. La tendencia espontánea del judío era considerar toda la Torá (el Pentateuco) como un bloque inmutable y sin fisuras. Algunos rabinos condenaban como herejes a los que decían: «Toda la Ley de Moisés es de Dios, menos tal frase». Jesús, en cambio, distingue entre el proyecto inicial de Dios y las interpretaciones posteriores, que no tienen el mismo valor e incluso pueden ir en contra de ese proyecto.
Segunda escena: los discípulos y Jesús.
Saca las conclusiones prácticas de la anterior, tanto para el varón como para la mujer que se divorcian. Las palabras: Si ella se divorcia del marido y se casa con otro, comete adulterio, cuentan con la posibilidad de que la mujer se divorcie, cosa que la ley judía solo contemplaba en el caso de que la profesión del marido hiciese insoportable la convivencia, como era el caso de los curtidores, que debían usar unos líquidos pestilentes. En cambio, la legislación romana sí admitía que la mujer pudiera divorciarse. Por eso, algunos autores ven aquí un indicio de que el evangelio de Marcos fue escrito para la comunidad de Roma. Aunque en los cinco primeros siglos de la historia de Roma (VIII-III a.C.) no se conoció el divorcio, más tarde se introdujo.

Estar cerca de Jesús

comentario editorial

“Ninguno de nosotros sabe lo que podría suceder ni siquiera el próximo minuto, pero seguimos adelante porque confiamos, porque tenemos fe” (Paulo Coelho)
7 de octubre. Domingo XXVII TO
Mc 10, 2-16
Y los acariciaba y bendecía poniendo sus manos sobre ellos
En uno de los cuadros de Domenico Morelli (1826-1901), Cristo y la mujer adúltera, Jesús aparece junto a una mujer sorprendida en adulterio, a la que salvó de ser apedreada por su pecado. Ella está cerca de Jesús, mientras que los acusadores se alejarán de él cuando se sientan acusados“Quien de vosotros esté sin pecado tire la primera piedra” (Jn 8, 7).
Ya el AT se hace eco de las grandes ventajas de la cercanía. “Para mí año bueno es estar junto a Dios, hacer del Señor mi refugio contar todas tus acciones”, canta el salmista en Ps 73, 28; Isaías dice: “Tengo cerca a mi defensor, ¿quién pleiteará contra mí?” (Is 50, 8); y Jehová dice a los profetas: “¿Soy yo sólo Dios de cerca y no de lejos?”  (Jr 23, 23).
Así lo entona también hoy André Rieu, acompañado por su orquesta:
“Cerca de ti, Señor, yo quiero estar.Pasos inciertos doy, el sol se va,más si contigo estoy, no temo ya”.
La proximidad de Jesús hace que nuestros vacilantes pasos por los tortuosos caminos del vivir sean seguros, aunque se ponga nuestro entorno. Estar con él nos da confianza para seguir andando. Y lo mejor en estos casos es avanzar cogidos del brazo del sabio consejo de David Thoreau, que un bello día dijo: Ve con confianza en la dirección de tus sueños. Vive la vida que has imaginado”Hay que seguir soñando.
Tuvieron en la Biblia sueños: Cuenta Génesis 2, 19, cuando vieron venir a su hermano José, dijeron: “¡Ahí viene ese soñador! Vamos a matarlo y echarlo en un aljibe; después diremos que lo ha devorado un a fiera, y veremos en que paran sus sueños; En Jueces 7, 13, uno de los del campamento estaba contando: “Mira lo que he soñado: una hogaza de pan de cebada venía rodando contra el campamento de Madián, llegó a la tienda, la embistió, cayó sobre ella y la revolvió de arriba abajo”; lo tuvo también Pilatos tuvo un sueño que Camilo Sexto canto en Jesucristo Superstar“Soñé un sueño muy extraño, que no sé interpretar”; y Martín Luther King, dijo: “I have a dream”, que era su lucha por la libertad y por todos los derechos del ser humano.
¿De qué categoría son los míos? ¿Son de cercanía, como los que maravillosamente cantaba don Miguel de Unamuno en su Diario íntimo?: Cada día hago nuevos descubrimientos en la vieja fe. Parece como se extiende la luz de un alba y su creciente lumbre el campo oscuro, que formaba una pastosa mancha, va cobrando contornos y contenidos y figuras y vida. ¡Cuándo saldrá el Sol!”
Saldrá, sin duda, cuando los dedos de la aurora pulsen las cuerdas de la lira enamorada, lo que sucederá en cualquier momento: “Ninguno de nosotros sabe lo que podría suceder ni siquiera el próximo minuto, pero seguimos adelante porque confiamos, porque tenemos fe” (Paulo Coelho)

PASADO, FUTURO Y PRESENTE
Cuando los dedos de la aurora pulsanlas cuerdas de la lira enamoradalos sueños se desmayan. 
Los del Pasado son pasadose ignoramos el cielo donde vuelansobre nubes perdidas del recuerdo. 
Los del Futuro son futuro, y vuelan presurosos,queriendo huir lejosdel mundo y de los hombres.
Sólo los del Presente son presente,y sin cesar batallanpor estar cerca de nosotros
Jesús siempre es Pasado,es Futuro y Presenteque alienta el caminar de nuestros sueños.

Los obispos del norte de África denuncian el “atropello de los derechos fundamentales” de los migrantes


Inmigrantes3“LA MIGRACIÓN PONE EN TELA DE JUICIO NUESTRA SOLIDARIDAD CON QUIENES SUFREN”, ALERTAN
“La migración es una de las principales causas de sufrimiento que nuestros países comparten”
“Denunciamos el atropello de los derechos fundamentales de los migrantes”, afirman los obispos del norte de África en un comunicado emitido tras la Asamblea de la CERNA (Conferencia Episcopal de África del Norte) que se celebró en Tánger (Marruecos) del 23 al 26 de septiembre.··· Ver noticia ··

Los gestos de la Iglesia con el franquismo


David Bollero

“Como cualquier cristiano tiene derecho a poder enterrarse donde crea conveniente”. Son palabras del arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, en relación al posible enterramiento de Franco en la cripta de la catedral de la Almudena. Así es la Iglesia católica: se siente ofendida porque una mujer se descubra el pecho en su templo mientras recibe con los brazos abiertos a un vil asesino.··· Ver noticia ··

EEUU lleva seis meses usando la base de Zaragoza para la guerra de Siria


Eduardo Bayona

El Gobierno admite una “autorización temporal” al ejército estadounidense para operar con tres aviones nodriza de repostaje y apoyo logístico que abastecen a las aeronaves que despliegan incursiones en Oriente Medio
El ejército estadounidense lleva seis meses utilizando la base aérea de Zaragoza, y seguirá haciéndolo, para sus operaciones militares en la guerra de Siria, según ha admitido la ministra de Defensa, Margarita Robles, en una respuesta parlamentaria al diputado de En Comú Podem Félix Alonso.··· Ver noticia ·

La Iglesia da el visto bueno a que Franco reposa en la Almudena


Carlos Osoro“En la cripta hay una propiedad de la familia Franco y como cualquier cristiano tiene derecho a poder enterrarse donde crea conveniente”, asegura el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro.
El arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, no se ha opuesto a que la familia del dictador Francisco Franco entierre sus restos en la cripta de la catedral de la Almudena si finalmente se procede a la exhumación de su cadáver del Valle de los Caídos y ha dicho que la Iglesia no tiene “inconveniente” en acoger a nadie.
“En la cripta hay una propiedad de la familia Franco y como cualquier cristiano tiene derecho a poder enterrarse donde crea conveniente”, ha indicado Osoro en declaraciones a los periodistas tras asistir hoy a la inauguración de la jornada “Agenda 2030: el reto de una educación que cambie el Mundo”.··· Ver noticia ··

La peor tiranía


Jaime Richart jurista y antropólogo 
Redes Cristianas
En todo escrito que se precie ha de haber concisión y ele­gancia. También, o quizá con mayor motivo, en los que hablan del ejercicio abominable del poder en toda su exten­sión. Aunque para este caso conviene añadir bizarría, pues el eufemismo y la metáfora para el caso son recursos retóricos superfluos, como las margaritas son alimento in­apropiado para el puerco. Pero ahora, en este escrito, por una complejidad nauseabunda inaudita en un país de la postmodernidad como es España, no puedo ser ni ele­gante ni conciso a pesar de que, lo reconozco, todo puede reducirse a una sola idea. Pero el intelectual, tiende a hacer inteligible lo complejo y a hacer complejo lo simple. Por eso me disculpo, porque ahora, por momentos, me constituyo en intelectual y de la simple idea “corrupción de proporciones siderales” que padece este país, voy a hacer una apretada y sumaria descripción. Confío en que el lector no sea muy severo al juzgarme…
En la España que vivimos el ejercicio abusivo del poder no está asociado ahora a una dictadura personal. Esta claro. Pero sí a una dictadura de la clase económica y so­cial predominante. El despotismo está repartido entre mu­chos; muchos incrustados en las instituciones del Es­tado en proporción de la variable electoral. Sin embargo, no es tanto el número como el pelaje de los que ocupan los órganos decisorios, es decir, los puestos clave de los que, amparados en la ley o en el aforamiento pero frisando o ca­yendo sin más en el delito, muestran ante los demás un atrevimiento que a menudo retrae a los políticos que no son de su misma catadura. Y si eso ocurre cuando enfrente están los que no son de su partido, qué no harán cuando actúan junto a los suyos… La prueba es que cuando un miembro del partido ha denunciado la fechoría de sus con­militones, el denunciante es perseguido por el aparato del propio partido como las bandas de forajidos o las ma­fias persiguen a quienes les traicionan…
El ejemplo estructural del ejercicio abusivo del poder está en la cabeza de todos: el metódico saqueo de las car­gas públicas durante al menos dos o tres décadas a cargo de esa formación compuesta básicamente por herederos del franquismo y de oportunistas sin ideología sólo hábi­les para el negocio turbio aprovechados por aquellos. Pero aparte de este fondo de pantalla, los ejemplos más calien­tes del poder abusivo son: en primer lugar, la actitud desa­fiante del cabecilla actual del partido conservador en un caso de flagrante impostura y engaño académicos que él mismo protagoniza; en segundo lugar y relacionado con ello, la presunta connivencia del poder judicial a través de la fiscalía y de miembros del alto tribunal que o no le juz­gará y si lo hace será para exonerarle; y en tercer lugar (aunque habría que haber empezado por esto), el modo de tratar el poder ejecutivo y el judicial el conflicto catalán…
Y en este asunto hay que decir muy alto que no es necesa­rio ser catalán, tener familia o intereses en Cata­lunya para ser intelectualmente honesto y despojar de to­das sus razones a esos poderes que se envilecen. Pues este conflicto no es cuestión de simple ideología. Pero si se afirma que lo es, será una ideología de esas que matan a ca­ñonazos las hormigas, pues no puede ser otra distinta la que no permitió en absoluto un referéndum, vinculante o no, acerca de la voluntad de un territorio expresada en las urnas. Por eso me pronuncio. Mi propósito de objetividad y de mesura, ausentes en la mentalidad de los verdugos que están al frente inmerecido de la nación a la que hasta ahora pertenece aquel territorio, significa que las aspiracio­nes de Catalunya y de dos millones de catalanes han puesto a prueba la calaña de los españoles que mane­jan de uno u otro modo al país entero. Esto es lo que me preocupa… precisamente como español.
Hay que hacer historia. Primero, tanto el poder guberna­mental como el judicial malogran el Estatut por medio de un tribunal, el constitucional, politizado hasta la náusea, que parece más un tribunal de orden público franquista que un tribunal de instancia neutral y aséptico cuyo equi­valente no existe en país alguno de la Unión Europea. Luego el ejecutivo aborta la intención de un referéndum para despejar, como el caso de Escocia o de Quebec, la vo­luntad del pueblo catalán medida en votos y no en son­deos demoscópicos de agencias privadas. Y por fin remata su miserable proceder acusando de delito de rebelión, pese a no haber precedido violencia de ninguna clase, a las cabezas visibles de una declaración de independencia. De­claración que responde más al asco y la repulsa del pueblo catalán hacia el poder central que le hizo objeto de humilla­ción al desvirtuar el Estatut, que a una intención real dependiente de una mayoría cualificada que a todas lu­ces no parecía existir; delito de rebelión, por cierto, que tribunales suizos, alemanes y belgas ni aprecian ni secun­dan en las resoluciones que por distintos motivos han de­bido formular desde que estalló el conflicto.
Y es que esto es el cuento de nunca acabar… Todo em­pezó en 1978 con una Constitución cocinada por 7 “pa­dres” que el pueblo no eligió, inspirada por el propio dicta­dor para sucederse a sí mismo. Desde entonces ha sido un suma y sigue de canalladas, de expolios, de cacica­das, de franquismo puro y duro y de traiciones al espíritu de la verdadera democracia. Y lo que es peor, en la magis­tratura y la justicia…
Ahora lo del líder del partido conservador que se autode­nomina de centro, lo del fiscal, lo del Supremo, lo de ese instituto privado del demonio enquistado en la uni­versidad… Todo verdaderamente insoportable ¿De verdad seguimos deseando seguir siendo españoles de esa cata­dura? ¿De verdad no se comprende que 2 millones de cata­lanes se nieguen a seguir siendo españoles?
Porque, después de presenciar en presente histórico déca­das de desmanes, de saqueo metódico de las arcas públicas, no sólo por parte de políticos incontables sino también por parte de miembros de la monarquía, llegó el turno de la justicia que ha debido ir rindiendo cuentas de su verdadero fuste en el enjuiciamiento de todo eso. Aun­que la medida más precisa de la calaña tanto de los gobier­nos anteriores como de los políticos que controlan la justicia y los jueces que completan su control, la da el con­flicto catalán. Es entonces cuando se ha puesto al descu­bierto que a diferencia de lo que ocurre en el parlamento donde las fuerzas políticas opuestas se encuentran frente a frente y más o menos muestran su verdadero pensamiento (aunque a menudo esté velado y más tarde se revele su falsía o su debilidad una vez en el poder), la justicia con­tiene en su estructura las mismas o parecidas fuerzas ide­ológicas entre sus jueces; ideología que a cadauno deter­mina su tarea de interpretar las leyes y aplicarlas. Y en esa correlación de fuerzas son los conservadores del espíritu franquista los que ganan por goleada…
Es sabido por distintos conductos que la realidad es, para unas cuestiones poliédrica y para otras dual, como lo es la propia naturaleza del proceso jurídico penal que gravita en torno al principio contradictorio. Sin tecnicismos más allá de los imprescindibles eso quiere decir que todo delito o supuesto delito va a ser sometido al juzgarse a por lo me­nos dos puntos de vista: el del fiscal, por un lado, y el del abogado defensor, por el otro. Lo que a su vez signi­fica que la verdad material, la que se depura en el procedi­miento, la que se supone está expuesta al castigo o a la ab­solución de un individuo admite la valoración penal y ética en un recorrido que va desde distintos grados de cul­pabilidad hasta la absolución. Lo que a su vez significa que esa verdad, como todo, depende del color del cristal con que se mire…
Y aquí está la prueba de fuego de lo que el asunto catalán representa en España en este aspecto, pues la manera despótica de tratarlo el poder central primero y el poder ju­dicial predominante después demuestra que al amparo de las leyes, leyes elegidas previamente para fundamentar decisiones que, vistas de cerca, resultan arbitrarias, se ha ejercido la tiranía. Y al decir de Montesquieu, la peor ti­ranía es la que se ejerce a la sombra de las leyes. Justo la que sucede en España…

Eventos que se titulan en España

José  María  Urio Ruiz de Vergara
Reig PlaCosas que pasan en España
1º) El portavoz del PP en el Senado leyó su tesis ante un tribunal de afines y diputados con Montoro al frente. Este señor es Ignacio Cosidó, quien , en la actualidad, lidera el movimiento para exigir que el presidente Pedro Sánchez presente sus alegaciones en el Senado referentes a la confección de su tesis. Pero hay más, según el periódico el diario.es: el ex director de la Policía ejercía por entonces de asesor del grupo parlamentario del PP cuando dos de sus diputados examinaron y evaluaron su tesis. Y todavía más: el tribunal de Don Ignacio Cosidó estaba compuesto por un histórico de la UCD, u colaborador asiduo de FAES, dos diputados del PP, como he señalado antes, y un condenado por robar 128.000 euros con las black. La hipocresía y la desfachatez crecen si límites, así como se hace insoportable y obsceno el abuso del PP de su mayoría absoluta en el Senado, consecuencia de una legislación electoral inicua.
2º) Reig Plá, primer obispo español en sumarse públicamente a los cardenales que piden desobedecer al Papa. No es de extrañar que el obispo que más exabruptos, vituperios, desprecios y hasta insultos, ha proferido públicamente contra las ¿”aberraciones”? sexuales, según él, de las que no han salido muy bien parados sus protagonistas, en un ejercicio admirable y ejemplar del amor evangélico, se haya sumado a los cardenales comprensivos. misericordiosos, tolerantes y caritativos que se asustan y sorprenden del talante evangélico de Francisco, tan parecido, para mi amigo borrachín Nicasio, al señor Jesús. Afirma, además, monseñor, Reig Pla, que criticar las reformas de Francisco es “un acto de amor al Papa”.
Ya que ve el Pontificado del papa argentino como la causa de “una Iglesia sin doctrina, que no es una Iglesia pastoral, sino una Iglesia del arbitrio y esclava del espíritu del tiempo”, y dado el profundo amor de Pla a la Iglesia, y su encarnado espíritu reformador, no extraña su posicionamiento de vanguardia ante la catástrofe que se intuye en la institución eclesial. ¡Iglesia del arbitrio! ¿Habrá meditado monseñor sobre la primacía de la libertad, y de la verdad? Y estamos tentados de preguntarnos, ¿Qué habrá hecho la ciudad y diócesis de Alcalá, para que esté sentado en su sede episcopal un obispo de la índole de Reig Pla como sucesor de Cisneros?
3º) ¿Por qué las catedrales de media Europa son propiedad del Estado, y en España e Italia, de la Iglesia? Hay que reconocer que es una buena pregunta. Si en los principales países de nuestro entorno, Francia, Portugal, Alemania, Reino Unido, las grandes joyas artísticas y de testimonio de la historia cultural de esas naciones no discuten el uso religioso de las mismas, pero el Estado se reserva su propiedad. Así tiene lógica la afirmación de Antonio Manuel Rodríguez, miembro de la Coordinadora Recuperando, quien asegura: “La catedral de Lisboa pertenece al Estado de Portugal; la de Notre Dame al Estado francés; la de Colonia al Estado alemán; y la abadía de Westminster al Reino Unido, y lo que ocurre en España es una anomalía”.
En los países citados hay un legislación que marca muy claramente la “diferencia entre propiedad (que corresponde al Estado) y uso (cuya responsabilidad recae en las instituciones eclesiásticas, que han de velar por que no se lleven a cabo iniciativas contrarias en la fe en terreno sagrado”. A la vista de estos testimonios choca, y llama la atención la queja del gerente del patrimonio del episcopado , Fernando Giménez Barriocanal, quien hace unos días se quejaba de que este Gobierno, -¡siempre las quejas contra Gobiernos de izquierda!, raramente contra la derecha de este país-, estaba intentando una nueva desamortización contra la Iglesia. Por lo que quedan, de alguna manera, retratado, cuando afirma que “son muy pocos los bienes que son económicamente rentables para la Iglesia”, y éstos, los buenos y rentables son, justamente, aquellos por los que la jerarquía de la Iglesia insiste en sus reclamación, cuando de otros pasa de largo. Y la pregunta es: si son ,en general, tan poco rentables, ¿por qué el episcopado español no imita a las conferencias episcopales de tantos países europeos, y no deja la propiedad al Estado, y se quita de líos y preocupaciones?

Democracia o nazifascismo

Leonardo Boff 
Leonardo Boff2Nunca en nuestra historia estuvimos situados ante una alternativa tan radical: el excapitán candidato a la presidencia, Jair Bolsonaro, que se presenta con todas las características del nazifascismo que causó millones de víctimas en Europa en la Segunda Guerra Mundial, y enfrente Fernando Haddad, al que no se le puede negar espíritu democrático. Bolsonaro mismo declaró que no le importa ser comparado a Hitler. Se ofendería si lo llamasen gay.
Cometió muchas barbaridades contra las mujeres, los negros, los indígenas, los quilombolas, los LGBT haciendo incluso apología abierta de notorios torturadores. Dejó claro en declaraciones inescrupulosas que pretende imponer una política represiva contra esos grupos como política de Estado. No sorprende que tenga el más alto rechazo en las encuestas de intención de voto.
Entendemos su resonancia pues no son pocos los que quieren orden en la sociedad a cualquier precio y que rechazan cualquier tipo de políticos a causa de la corrupción que corroe este país. Siempre la búsqueda del orden sin preocuparse por la justicia social ni por los procedimientos jurídicos correctos fue el humus que alimentó y alimenta aún hoy a los grupos de derecha y de extrema derecha. Con Hitler fue así: “Ordnung muss sein”: “debe imperar el orden”. Pero un orden impuesto mediante la represión y el envío de judíos, gitanos y opositores a los campos de exterminio.
Bolsonaro explota esta búsqueda del orden a cualquier precio incluso con la militarización del gobierno, como ya ha sido publicado en la prensa. En caso de ganar, que el cielo nos libre, colocará en los ministerios clave a generales, en su mayoría jubilados, pero con una mentalidad francamente derechista y autoritaria. Hasta propone eventualmente un auto-golpe, es decir, Bolsonaro como presidente puede convocar a las fuerzas armadas, disolver el Parlamento e instaurar un régimen autoritario y altamente represivo.
No tenemos alternativa sino unirnos, más allá de los intereses partidistas, para salvar la democracia y no permitir que Brasil sea considerado en todo el mundo un país políticamente paria. Esto afectaría a gran parte de la política latinoamericana, especialmente a aquellos países cuyas democracias son frágiles y están bajo el fuego del pensamiento derechista que crece en el mundo entero.
No es de extrañar que conglomerados financieros que viven de la especulación, asociados a empresarios que no tienen ninguna consideración por el futuro de la patria sino por sus propios negocios, y asociados a los burócratas del Estado afectos a la corrupción y a las negociaciones turbias, constituyan la base social de sustentación de un tal régimen autoritario de cariz fascista y nazi.
Sería una ruptura inédita en nuestra historia nunca habida antes. Los militares y empresarios que dieron el golpe de 1964 eran por lo menos nacionalistas y exaltaban un crecimiento económico a costa de los bajos salarios y del control riguroso de las oposiciones, con arrestos, secuestros, torturas y asesinatos, confirmado hoy hasta por documentos provenientes de los órganos de seguridad y de la política exterior de los Estados Unidos.
El pueblo brasileño, que tanto ha sufrido ya a lo largo de la historia, primero bajo el látigo de los señores de esclavos y después por la superexplotación del capitalismo nacional, no merece sufrir todava más. Tenemos con él una deuda que nunca llegamos a pagar. Y ella nos será cobrada hasta el juicio final.
Alimentamos la esperanza de que el buen sentido y la voluntad de reafirmar la democracia de la mayoría de los votantes nos librarán de este verdadero castigo que, efectivamente, no merecemos.
*Leonardo Boff es teólogo, filósofo y escritor.

Traducción de Mª José Gavito Milano

Francisco de Asís signo de futuro

José  Arregi 
José Arregui1El próximo día 4 es la fiesta de Francisco de Asís, el bendito Poverello. Lo celebraré. Me gustaría que también tú, quien quiera que seas, te acuerdes de él y lo mires de cerca. Te hará bien. Su figura nos devuelve la fe en lo mejor que llevamos como frágil tesoro, la fe en nuestra pobre arcilla, en la humanidad, en la Tierra, en la santa materia, en el poder de la bondad para transformar el mundo.
Todo lo que fue y enseñó se resume en una palabra: hermano. O hermana, pues estoy seguro de que el género (el masculino, el femenino y todas sus variantes y gamas, con permiso de nuestros obispos) no era para él exclusivo ni excluyente. Llamaba hermanas a todas las personas, a todas las criaturas. Las sentía y las hacía ser hermanas. Hay que ser muy humilde para ser tan hermano, tan humano, y poner perdón donde hay ofensa, amor donde hay odio, verdadera alegría donde hay tristeza. Hay que ser muy pobre de sí y creer en sí mismo para poder hacerlo.
Francisco lo hizo. Todos sus sueños juveniles y medievales de grandeza, riqueza y dominio se le fueron desvaneciendo a medida que miraba los ojos y el cuerpo desnudo de Jesús, tan crucificado y luminoso, en la penumbra de la ermita de San Damián a las afueras de Asís. Y a medida que miraba el rostro y el cuerpo llagados de los leprosos, los más humillados de la sociedad de la época. “Al principio me resultaba muy amargo verlos –escribe en su testamento–, pero tuve compasión de ellos, y lo que me era amargo se me volvió dulzura de alma y de cuerpo”. La mirada y el gusto se le fueron transformando. Jesús le llevó a los leprosos, y los leprosos le llevaron a Jesús. Y así se encontró a sí mismo. Y, libre de sí, pudo hacerse hermano de todos.
Fue hace 800 años. En una época crucial, un cambio de época en la historia de Europa, cuando la sociedad feudal de señores y vasallos tocaba a su fin, cuando en los burgos o ciudades medievales emergían y empezaban a imponerse los mercaderes burgueses como nueva clase de señores, Francisco optó por los más pequeños y sometidos. Rompió con su padre mercader y escogió ser de la clase de los menores, vivir con ellos y como ellos. Hasta al ladrón y al asesino los llamaba hermanos, convencido como estaba de que la violencia de los pobres tiene su origen principal en la violencia institucional que padecen, y de que solo la revolución de la fraternidad y de la ternura podrán vencer la violencia de unos y de otros. De eso nos habla aquella florecilla en la que Francisco amansa al “hermano lobo”, que no mataba sino porque nadie le daba de comer.
En una época en que la institución eclesial –clerical, dogmática, autoritaria– se hallaba corrompida por las riquezas, enredada en conflictos de poder con ejército propio incluido, obsesionada en eliminar todas las herejías y a todos los herejes, obstinada en sus cruzadas contra los pérfidos sarracenos, soñó una Iglesia fraterna-sororal, más allá de la vieja división, hoy todavía tan vigente, entre clérigos y laicos. Una Iglesia humilde, pobre y humana, hermana. Una Iglesia que no condena a nadie y que proclama la misericordia por encima de todos los dogmas y leyes.
Profesaba profunda veneración al clero, sobre todo a los sacerdotes más pobres e ignorantes, por el poder sobrenatural que habían recibido de perdonar los pecados y de hacer presente a Jesús en el pan y el vino. Así se lo habían enseñado, y él lo creía. Pero algo le decía que no. Y de hecho no quiso ser sacerdote, y no se trababa en el fondo de un gesto de humildad, sino de rechazo inconsciente -¿o tal vez consciente?– de aquel modelo de Iglesia que aún sigue en pie. Ni quiso ser monje, bien instalado en un monasterio, muy por encima de la gente pequeña. Quiso ser “hermano menor” de todos. .
Tampoco quiso, por eso mismo, fundar una nueva Orden, sino una fraternidad de hermanos (¡y de hermanas!) menores con los menores de la sociedad, caminando por los campos y aldeas, como Jesús, sin conventos y sin propiedad alguna, sin dominio sobre nadie, trovadores de la paz. A aquel movimiento innovador se apuntaron multitudes, y todos admiraban y amaban al Poverello, pero solo un puñado le siguió de verdad. Los demás se convirtieron en Orden clerical poderosa, volvieron al pasado.
Pero Francisco, hermano menor humilde y bueno, sigue ahí señalando el futuro.
(Publicado en DEIA y en los Diarios del Grupo NOTICIAS el 30 de septiembre de 2018)

Reig Plá, primer obispo español en sumarse públicamente a los cardenales que piden desobedecer al Papa


Reig PlaEl prelado de Alcalá presentó el libro póstumo de Carlo Caffarra, uno de los cuatro purpurados que avalaron la desobediencia al Papa por su gestos aperturistas
Criticar las reformas de Francisco “es un acto de amor al Papa”, según el polémico obispo, líder del sector ultraconservador de la Iglesia española
Ve el Pontificado de Bergoglio como “una Iglesia sin doctrina” que “no es una Iglesia pastoral, sino una Iglesia del arbitrio y esclava del espíritu del tiempo”··· Ver noticia ··

Lilith y Clara Campoamor

Juan José Tamayo, Director de la Cátedra de Teología y Ciencias de las religiones “Ignacio Ellacuría” Universidad Carlos III de Madrid y autor de Religión, género y violencia (Dykinson, 2017, 2ª ed., 1ª reimpresión)


El 1 de octubre se cumpleaños 87 años del reconocimiento del voto a las mujeres en España gracias al compromiso feminista de Clara Campoamor que ese día pronunció un discurso memorable en defensa de la igualdad política de los hombres y las mujeres apelando al mito bíblico de Lilith.
Durante mis largos años de estudios de Filosofía, Teología y Biblia, nunca oí hablar de Lilith, cuyo descubrimiento fue muy tardío. La ignorancia sobre este personaje de la mitología hebrea es casi enciclopédica. Cuando explico la asignatura de “Las mujeres en el judaísmo” en un curso de Humanidades que vengo impartiendo desde hace dos lustros en la universidad Carlos III de Madrid, acostumbro a preguntar: “¿Quién fue la primera mujer de Adán?”. La respuesta es casi unánime: “Eva”. Pero siempre hay una alumna que responde: “Lilith”.
Y me produce una gran satisfacción, ya que su respuesta me da pie para empezar la genealogía de la historia de las mujeres con el mito de Lilith como referente del no sometimiento de las mujeres a la voluntad de los varones y como símbolo de la igualdad y del empoderamiento de las mujeres.
Quien sí conocía, y muy bien, el mito de Lilith era Clara Campoamor (Madrid, 1888-Suiza, 1972), abogada y política madrileña y una de las tres diputada de las Cortes Constituyentes de la II República Española, quien lo citó en su memorable discurso del 1 de septiembre de 1931 en el Congreso de los Diputados en defensa del voto de las mujeres.
En aquel discurso calificó de profunda piedad y de profunda ternura “estatuir el divorcio en España, porque no hay matrimonios deliciosos, y es insensato querer condenar a la indisolubilidad del vínculo cuando no haya manera de que se soporten dos en la vida, arrastrando uno de los cónyuges, o tal vez los dos, el peso de esa cadena, a la manera que arrastraban antiguamente los presidiarios aquellas bolas de hierro que marcaban la perpetuidad de su pena”.
Había diputados que se oponían al divorcio alegando que supondría un ataque a las ideas religiosas. Su respuesta no pudo ser más respetuosa, al tiempo que más coherente. Les reconoció de buen grado el derecho a que la sociedad respete sus creencias y a proteger el sacramento del matrimonio, pero les dijo que a lo que no tienen derecho es a imponer a toda la ciudadanía su criterio y su voluntad.
A dichos diputados les recordó que, en vez de cumplir la doctrina de Cristo, lo que hicieron fue “un pacto con el trono, y los pactos del altar con el trono se han hecho siempre en beneficio del trono y con desdoro del altar”, y que la bandera de las causas humanitarias, “no de caridad”, que ellos no recogieron, es la que se quiere llevar al proyecto de Constitución.
Les echó en cara que incumplieran su mandato de conciencia, se alistaran con los poderosos y sirvieran al trono. Y les preguntó: “¿cómo podéis quejaros ahora de que nosotros recojamos esa bandera olvidada y caída y tratemos de levantarla para instaurar de una vez […] lo que es deber de ternura hacia los hermanos de todos los órdenes y en todas las esferas”.
Fue en este momento del discurso en el que se refiere a Lilith como prueba de lo vieja que es “la lucha de los sexos” y presenta a la mítica primera mujer de Adán como paradigma de mujer que se niega a acatar la voluntad del varón. En dicho mito descansa una parte fundamental de la argumentación de Clara Campoamor. Este es su razonamiento:
“Solo voy a haceros un pequeño recuerdo. Esta historia de la guerra de los dos sexos es tan vieja como el mundo. La vieja leyenda hebraica del Talmud nos dice que no fue Eva la primera mujer de Adán, sino Lilith, que se resistió a acatar la voluntad exclusiva del varón y prefirió volver a la nada, a los alvéolos de la tierra; y entonces, en la esplendidez del paraíso, surgió Eva, astuta y dócil para sumisión de la carne y del espíritu. De las diecisiete Constituciones dadas después de la guerra, tanto tres niegan o aplazan el voto de la mujer. Los hombres de esos países y han reconocido que Adán no ganó nada con ligarse, en vez de a la mujer independiente, de voluntad propia y de espíritu amplio, a la Eva claudicante y sumisa” (cf. Isaías Lafuente, La mujer olvidada. Clara Campoamor y su lucha por el voto femenino, Temas de Hoy, 2011).
En 2003, setenta y dos años después del discurso de Clara Campoamor, y quizá inspirándose en él, el cantautor canario Pedro Guerra dedicó una canción a Lilith en su disco “Hijas de Eva”, en la que le reconocía como la primera mujer que se negó a someterse al varón, a dejarse gobernar por él, y se decidió a volar.
“¿Quién fue la primera mujer
la que se hartó de vivir para Adán
y se marchó del Eden?
¿Quién fue la mujer que pasó
del paraíso del bien y del mal
y sin pensarlo se fue?
Ni heroina, ni princesa,
ni voluble, ni perversa,
crece libre y no se deja
someter.
¿Quién fue la mujer que también
surgió del polvo y la arcilla y no fue
hueso del hueso de Adán?
¿Quién fue la mujer que creció
en la subversión y no quiso entender
el se*o sin libertad?
Ni heroína, ni princesa,
ni voluble, ni perversa,
crece libre y no se deja
someter.
Lilith fue la primera mujer,
Lilith fue la primera mujer,
la primera mujer.
¿Quién fue la mujer que cansada
de vivir infeliz y atrapada
se decide a volar?
¿Quién fue la primera mujer
que independiente en su forma de ser
no se dejó gobernar?
Ni heroína, ni princesa,
ni voluble, ni perversa,
crece libre y no se deja
someter.
Lilith fue la primera mujer,
Lilith fue la primera mujer,
la primera mujer”.
Desde mi interpretación feminista, creo que Lilith es hoy uno de los símbolos más luminosos de la lucha contra el patriarcado. Ella es una mujer insubordinada y rebelde. Osa afirmar su propia identidad sin dependencia del varón, cuestiona el rol dominante del hombre y reclama paridad con él. Abandona a su compañero desobedeciendo a Dios, que le manda someterse a él. Se atreve a invocar el nombre de Dios, algo que estaba prohibido en el judaísmo porque invocar su nombre era conocer su esencia y se consideraba un acto de soberbia.
Quebranta lo establecido y niega el orden social de las cosas. Aparece como mujer mala por ser insumisa en oposición a la mujer buena y sumisa asociada con la maternidad (Eva) y con la pureza /María). Abre la puerta a la transgresión e instiga el deseo prohibido. Es apátrida, extraña, autoexiliada. Creo que le es aplicable lo que dice Virginia Woolf de sí misma: “En mi condición de mujer, no tengo patria. Como mujer no quiero patria. Como mujer, mi patria es el mundo entero”.
A lo que la teóloga feminista Jane Schaberg añade: “Como mujer, no tengo religión. No soy judía o cristiana o musulmana o pagana. Como mujer soy judía y cristiana, musulmana y pagana”. Igualmente puede aplicarse a Lilith la descripción que hace Virginia Woolf de su amiga Ethel Smyth, compositora inglesa y dirigente del movimiento sufragista: “Pertenece a la raza de las pioneras, de las que van abriendo camino. Ha ido por delante, y talado árboles, y barrenado rocas, y construido puentes, y así ha ido abriendo camino para las que van llegando tras ella”.

Cuerpo a tierra


Alberto Revuelta

El rey Felipe VI, el inviolable según decisión del PSOE de no reformar la Constitución en materia de aforamientos, ha ordenado subir el sueldo a sí mismo, su mujer, su padre y su madre. Su sueldo este año será en bruto 242.769 €. Su esposa cobrará 133.530. Su padre, 194.232 y su madre 109.260. Escribo en el despacho de la abogacia pro bono en las 3.000 viviendas de Sevilla donde los ingresos familiares oscilan entre 286 y 360 euros mensuales, con suerte. Así pues con el sueldo anual del rey vivirían aquí 481 personas. Con el de su esposa 269. Con el de su padre 385 y con el de su madre 216. Esto es, con lo que cobran cuatro personas al año, vivirían aquí 1.351.··· Ver noticia ··