Volvemos sobre un tema ya muy tratado. Y
Olga lo aclara muchísimo. Porque, según ella misma nos dice, en
Chile un obispo del Opus se empeña en poner toda su autoridad
en resucitar ese ogro artificial que se llama Ideología de
género, “la más “artera” de las ideologías que hoy atacan al mundo y a la fe
cristiana” y cuyo rechazo atribuye al papa Francisco. Ver en El mostrador. AD
1- Planteo
Últimamente se escucha hablar muy fuerte y con mucha animosidad acerca de la
Ideología de Género. Las iglesias Católicas y Protestantes, las Congregaciones
Evangélicas, los parlamentarios, los partidos políticos, todos ellos se han
involucrado en esta discusión sin siquiera determinar claramente de qué están
hablando ni de que perspectiva están mirando el tema, que no sea la satanización
que es obvia.
2- Qué es la “ideología”
Cuando hablamos de Ideología apuntamos a un conjunto de postulados, creencias
o datos de la realidad, que nos sirven de base a algún modelo de entender la
realidad. Y sobre esa perspectiva de entendimiento de la realidad configurada en
ideas, digamos nuestra ideología, modelamos nuestras acciones individuales,
relacionales o comunitarias.
Dentro de estos postulados hay algunos que son claros a primera vista, y
otros que no lo son. Hay algunos que se apoyan en realidades de las cuales
existe consenso, y otras que son discutibles, ya sea por el avance de la Ciencia
de la cual la mayoría no está al tanto, o porque las diferentes sociedades y
culturas del mundo no están de acuerdo.
3- La “ideología de género”
La ideología de género sería, entonces, el conjunto de postulados y creencias
que se tiene sobre los géneros humanos, en relación:
– a la morfología dada por el sexo en sus
características
- – corporales,
- – genéticas,
- – orgánicas,
- – hormonales,
- – cerebrales;
– a su rol en la sociedad respecto
- – al sexo,
- – a la reproducción,
- – al trabajo,
- – al poder y
- – a los derechos civiles;
- – y finalmente a su sentimiento íntimo de pertenencia.
4- la realidad en el corralito de “dos sexos”.
La ideología de género debiera abarcar a ambos sexos y no solo al femenino,
si queremos hacer una descripción del tema, ya que solo tenemos definidos dos
sexos, y estamos amarrados a clasificar por exclusión. Lo que no es femenino
tiene obligatoriamente que ser masculino, dejando fuera un ámbito de la realidad
que quizás existe y necesita ser trasparentado.
Además, las clasificaciones son constructos humanos fabricados con fines
pedagógicos y no representan la totalidad de la realidad y sus matices.
Para el mundo primitivo, los seres vivos observados se dividían en 2 grandes
grupos:
- – Los que parían hijos y
- – los que no parían hijos.
De ahí que en algunos idiomas la palabra mujer está definida por su rol de
“productora de creaturas.”
5- Observando la Naturaleza.
Esta observación deja fuera muchas categorías de animales hermafroditas, o
cuya función productora de creaturas cambia de forma según exista comida o estén
pasando una hambruna, ya que la Madre Naturaleza o el Dios Padre, como queramos
llamarlo, son pródigos en soluciones diversas que no tienen nada que ver con la
moralidad humana.
6- Dimorfismo sexual
En los mamíferos y los seres humanos se puede aplicar grosso modo esta
visión, que está respaldada en casi todos los casos por la diferente morfología
externa masculina y femenina. Macho y Hembra.
En los seres humanos existe un dimorfismo sexual:
- – que le da al macho mayor altura, mayor desarrollo muscular, mamas atrofiadas y órganos sexuales externos.
- – La mujer es generalmente de menor altura, tiene mayor cantidad de grasa corporal, menos desarrollo muscular, tiene mamas más desarrolladas, y sus órganos sexuales no son visibles externamente y solamente posee una vagina que permite la penetración del órgano sexual masculino con fines de reproducción y de placer, el gran regalo que recibimos y que parece que no es común dentro del Reino Animal.
7- Los “genes” (X e Y) y las “hormonas”
Ambos sexos son el producto de una unión de un espermatozoide masculino que
puede contener dos características: un gene X heredado de su madre que da origen
a todas las mitocondrias celulares, o un gene Y que contiene las características
que masculinizan al huevo fecundado.
La mujer produce un huevo que contiene XX, definiéndose como femenina tanto
por su constitución celular como por su constitución orgánica.
Durante la gestación, las hormonas producidas por la madre hacen blanco en
las células del hijo, teniendo esta función un programa en el tiempo que debe
ser seguido en un cierto orden. Así, las hormonas masculinas de la madre hacen
blanco en las células precursoras que producen los órganos sexuales del hijo, y
éste comenzará a producir testosterona masculinizando su cerebro y todas sus
órganos.
Del mismo modo las hormonas femeninas de la madre hacen blanco en las células
precursoras de los órganos sexuales femeninos, echando a andar la máquina
hormonal del feto y las hormonas de éste harán blanco en su propio cerebro en
formación.
Todo este juego hormonal que tiene un programa a través del tiempo, sigue
después del parto, durante toda la vida.
8- Después del parto: el juego sigue
Durante todo el tiempo que va desde la concepción al nacimiento, la vida
extrauterina y la muerte, el organismo estará adaptando su genética a las
circunstancias que le toca vivir.
Estas circunstancias se verán reflejadas
- – en el cuerpo físico,
- – en el cerebro,
- – en el sistema nervioso y
- – en el sistema hormonal,
a través de mecanismos de adaptación genética que posee la célula, prendiendo
o apagando ciertas potencialidades según cómo sea su percepción del medio
ambiente, percepción que no pasa necesariamente por el consciente.
9- Precaria determinación del “sexo” del recién nacido
Al nacimiento, la determinación del sexo del recién nacido se hace por la
visión de los órganos sexuales externos:
- – Si tiene pene es hombre,
- – si no tiene pene, es mujer.
No he visto que se haga examen genético ni que nadie hay recomendado una
Ecografía para ver si tiene ovarios.
Esta visión es sumamente parcial, ya que sabemos que existe un sexo genético
que no necesariamente es XX mujer e XY hombre, sino que puede tener variaciones
como XXY o XYY, o variaciones en la feminización o masculinización del cerebro,
ya que el programa de desarrollo no es 100% inalterable.
Esto se ha visto en muchas atletas femeninas, que han sido descartadas porque
su sexo genético les producía una ventaja muscular sobre su propio sexo
explícito.
Además, el sexo externo de una creatura puede estar acompañado de ovarios y/o
vagina que a la hora de la pubertad se van a echar a andar feminizando al sujeto
que durante 12 o 14 años ha creído ser varón.
También se da el caso de clítoris largos que son clasificados como penes
llevando a errores que a veces tardan años en reparase.
10- Una suerte de “destape”
Todos estos problemas han sido tradicionalmente ocultados por los sujetos y
sus familias, pero ahora están saliendo a la luz.
¿Por qué ahora?
- * Porque se sabe más sobre la naturaleza biológica de los seres vivos.
- * Porque las personas viven en sociedades modernas que tratan de respetar a los individuos en su intimidad personal, ya que no hay cosa más personal que el sexo y el sentimiento de representar en sociedad el papel en el cual se sienten bien, y sin hacerle daño a nadie.
- * Por eso hay que dar cabida a estas personas en la situación que les calce mejor a su felicidad.
11- Variaciones del “objeto sexual”
En cuanto a los roles de sexo, se sabe que dentro de los dos sexos
tradicionales, el objeto sexual no es fijo e invariable. Ni tampoco en los
mamíferos, que disciernen por olores, se da en todos los casos que el objeto sea
el que corresponde.
Pero en el ser humano sabemos que el objeto sexual no está necesariamente
fijado
¿Por qué a un hombre le gusta el olor a hombre y no de mujer y viceversa?
¿Variaciones en el programa genético de desarrollo? Es lo más probable, ya que
el correlato físico de nuestras emociones está asentado en el cerebro. Pero la
homosexualidad es tan vieja como el mundo y es la Naturaleza en su variabilidad
la que se muestra juguetona y liquida nuestras clasificaciones.
Y el caso más extraño es el de los transexuales, que no tiene que ver con el
objeto sexual, sino con el sentimiento de pertenencia a un sexo distinto del que
se tiene. Lo inquietante es que se suele dar desde muy temprano, desde la
primera infancia.
Es el sentimiento del propio yo, ese constructo mental al que le hemos
concedido el timón de nuestras vidas. Es ese yo, al que le duele cuando nos
pegan, sufrimos cuando nos abandonan, tiene afectos y desafectos, y en este caso
no se siente identificado por el cuerpo que lo materializa.
12- La corteza cerebral: escenario dramático
Hace muy poco tiempo que las investigaciones neurológicas descubrieron que el
problema radica en la feminización o masculinización de la corteza cerebral. Si
les interesa ver:
Y ese es un drama que ha salido a flote este último tiempo, pero que hay
ejemplos en el mundo que existe en varias partes.
En India hay una casta de hombres travestidos que sus familias echan de la
casa, y se tienen que ganar la vida como prostitutas. Forman familia y viven
juntos en algún rincón de la ciudad. Nadie condena a los hombres machos que
acuden a esas prostitutas. ¿No suena terrible? ¿No sería mejor dejar que los
dejen adoptar el sexo femenino, y que sus familias puedan acogerlos? Ya de hecho
su vida es triste y confusa y no veo razón para hacérselas más triste, excepto
nuestros malos instintos.
¿Por qué tanto encono con las personas que tienen ese problema? ¿A quién
dañan? ¿Qué nos importa si andan con melena o rapados? ¿O si se visten de
señorita? ¿Por qué vamos a sentir que les hacen daño a nuestros hijos? Si
nuestros hijos no tienen ese problema, dudo que los imiten.
Y tanto escándalo por los baños, cualquiera diría que en un colegio
civilizado no hay casillas separadas ¿o lo que realmente temen es la curiosidad
insana de los niños y su crueldad para con los que son diferentes?
¿No será que hay que educar a los niños para que vean gente diferente? ¿O no
quieren hablar de eso?
13- Ideología de género: ¿ideología o reclamo?
Estos son algunos de los ítems que se ven en la famosa “ideología de género”
que no pasa de ser un reclamo de los excluidos de la supuesta normalidad
humana.
Hay otro tema que lo meten junto con las variaciones de la naturaleza humana
en el campo sexual, y es el reclamo femenino por su desigualdad de
oportunidades, de roles y de derecho a la dignidad y respeto que debería tener
cualquier ser humano y que constituye el Movimiento Feminista.
La verdad es que no tienen nada que ver excepto que ambos son reclamos de
parte de la población humana, siendo el caso del feminismo el 50% de la
población.
Además, es un reclamo contra algo cultural que es más modificable que la
fisiología de las gónadas o del cerebro.
Por muchos siglos e incluso actualmente, la mujer ha sido sujeto de un
encasillamiento en roles predeterminados, y de un maltrato en muchos campos
permitido y avalado por la costumbre.
La costumbre es la repetición ad infinitum de un modo de ver las cosas y
accionar sin pararse a reflexionar si está bien o mal, en el sentido de que
estamos haciendo sufrir a alguien.
Cuando ese alguien adquiere la libertad para hacer presente su queja, en vez
de pararse a reflexionar se para a pontificar y cuestionarla.
Cualquier queja acerca del rol de la mujer -o su maltrato-, es tachada de
“ideología”, como si fuera una doctrina aprendida como loro y que debe ser
desechada como un peligro para la sociedad o como inmoral.
14- la presión religiosa
Curiosamente los principales detractores de esta queja y solicitud de
revisión de los principios en el cual se basa el maltrato consensuado, son las
religiones monoteístas.
Sin embargo, el principal referente en Occidente es Jesús de Galilea, y él no
fue un maltratador ni de mujeres, ni de homosexuales ni de los niños y toda su
doctrina se refiere al buen trato entre personas, y él es el referente
ideológico del cristianismo.
No se explica, por lo tanto, donde está el famoso cristianismo que postulan
para satanizar el movimiento feminista y el movimiento de transexuales y
homosexuales.
15- Caminos mejores
El avance de la humanidad va por profundizar la tolerancia a las diferencias
legítimas, por el ahondamiento de la compasión, no por la capacidad tecnológica
para hacer guerras no por la capacidad de esclavizar al prójimo y
explotarlo.
Pero los seres humanos solo hace muy poco consensuaron que la esclavitud no
era una buena cosa. Sin embargo se siguen esclavizando mujeres en formas más o
menos civilizadas, y eso es lo que las mujeres desean, que los hombres
visualicen estas acciones y las comprendan:
- – Igual remuneración para trabajos,
- – iguales responsabilidades en el hogar y en la crianza,
- – sexo consensuado y no impuesto,
- – respeto mutuo.
Esto es ideología de género feminista y se basa en el supuesto de que como
seres humanos, hombres y mujeres merecen igual dignidad y respeto, y son aptos
para todos los trabajos.
16- Concluyendo
Pienso que la “ideología de género” se convierte en un problema para los
abusadores de siempre, que necesitan esclavas gratis en casa, un problema para
las mujeres que no estiman a su propio sexo, o la rigidez mental de aquellos que
nunca han revisado la veracidad de los postulados que afirman sus propias
ideologías sobre el mundo.
¿Por qué, si no, ese ampararse en la religión y echarle la culpa a Dios?
Porque están tan inseguros de sus propias visiones de mundo que necesitan un
patrocinador supra importante y socialmente garantizado. Su frase más célebre es
“lo dice la Biblia”, aunque también la biblia dice que hay que hacerse cargo del
pobre, del débil, de la viuda y del huérfano y no vemos a nadie haciéndose cargo
de nada.
Quizás es más honesto decir que algo no nos gusta, sin implicar en ese “no
gusta” la necesidad de que el otro desaparezca o lo borremos del mapa o no tenga
derechos cívicos.
A mí no me gustan las cumbias, y no por eso voy a hacer una cruzada contra su
producción y ejecución. Agradecería que no me las pusieran fuerte o cuando voy a
dormir. Y se acabó.
…………………….
NOTA: la presentación en parágrafos (1 a 16) es
un agregado de Óscar.