Con admirable brevedad y sencillez, esta nota
de Blas Lara nos anima a reflexionar sobre un dogma de fe: la verdadera
condición humana de Jesús. Hay más herejes por negar la humanidad de Jesús, cosa
que sabemos en qué consiste, que en negar su divinidad, que no podemos saber en
qué consiste.
Se peleó Jesús con otros niños cuando tenía pocos años? Qué te parece?
Piénsalo unos segundos. Parece escandalosa la pregunta. Yo creo que sí lo debió
hacer. Es importante hacernos este tipo de preguntas para desinfectar nuestras
ideas de prejuicios de lo que fue la verdadera humanidad de Jesús que como
escribe Lucas, iba creciendo en edad y sabiduría delante de Dios y de los
hombres. (Lo más llamativo: delante de Dios. Cómo es posible?)
Jesús adolescente fue desarrollándose. Iba aprendiendo lenguas, quizás el
griego. Iba enterãndose del entorno sociológico en el que vivía. Poco a poco iba
teniendo una representación del mundo, como todo adolescente. Iba tomando
conciencia de la dominación romana. Amplificando su panoplia de estrategias
frente a los demás, tan indispensable para desenvolverse en la vida. Yo lo veo
reaccionando frente al niño que le daba la lata. Un día azotaría a los
mercaderes del templo. Aprendiendo a callarse y tragarse la lengua ante los
dominadores.- dadle al César lo que es el del César. Una querella inútil que no
conducía a nada afrontarla. Se formó en la ley, pero con un inflexible espíritu
crítico, que le llevó a la rebeldía y la confrontación constante con los
maestros de la Ley. Jesús fue un rebelde.
De las realidades políticas y sociales del momento, debió formarse una image.
Pero limitada y condicionada por su corta vida y por su exiguo entorno
geográfico-político. Por eso tal vez nos falta en los evangelios un proyecto de
ordenación social que sirviera como paradigma para las sociedades futuras. Como
lo hizo Mahoma y ahora estamos viendo las consecuencias.
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