Xavier Casanovas
Hace tiempo que trato de hacer apología de la necesidad de secularizar la Cuaresma. Por razones evidentes, nuestras sociedades occidentales han ido tomando cada una de las celebraciones religiosas y adaptándolas al calendario secular: la Navidad se ha convertido en la adoración al dios del consumo; la Pascua en una rendición al pecado de la gula; las Fiestas Mayores, consagradas históricamente a la devoción piadosa de los patrones de los pueblos, en la entrega a una fiesta sin fin. Y en algunos casos, podemos llegar a afirmar que no se ha perdido el sentido del todo ··· Ver noticia ··
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