Con cierta hilaridad e incredulidad hemos escuchado en varios medios de comunicación social que el Congreso Nacional, esa hidra de múltiples cabezas tan desprestigiado y corrupto de Honduras, se apresta a discutir una nueva Ley—de esas leyes que no pasan de ser papel mojado–en este caso sobre la paternidad irresponsable.
Este es un tema que en este país con fuertes raíces patriarcales, mejor llamémoslo machistas e irracionales y alimentado por iglesias, sociedad y gobierno, ha generado tantas frustraciones y es una de las principales causas de tanta desgracia porque de esta manera se ha afectado a las mujeres–esos seres que sin rubor muchos animales machos celebraremos una merecida fiesta el próximo domingo–pero sobre todo a la niñez y juventud, sectores tan valiosos que deberíamos cuidar como diamantes ya que representan el futuro de la sociedad.
Con indignación vemos cómo esos “ejemplares padrones” sin sonrojarse se ufanan de ser padres de una gran camada, como si se tratara de bestias irracionales que todos los domingos llenan las iglesias, comulgan, levantan las manos, claman la sangre de Cristo (pero aborrecen su sangre) y lloran de manera hipócrita y cobarde.
Hace unas décadas conocí en vísperas de casarse una pareja cuyo hombre tenía embarazadas simultáneamente a tres jovencitas que parieron todas el mismo año que su esposa y hoy con mucha capacidad económica se pavonea como “gran señor”, mientras los hijos “bastardos” ya adolescentes pasan muchas calamidades y limitaciones. Pero este caso no es único, es un mal de la sociedad, pero esto es más común entre los militares y policías, esos animalillos que pretenden dar clases de ética, moralidad y patriotismo a los niños, a la juventud y a la sociedad en general. Además no se escapan de este mal algunos clérigos y pastores que están doblemente obligados a ser ejemplo de verdadero amor.
Dentro de las vergüenzas que arrastran los gobiernos de Honduras está que en nuestro país existen más de 700 mil mujeres madres solteras que sostienen solas sus hogares y el país es el segundo de Latinoamérica con la mayor tasa de embarazo de menores adolescentes.
Ojalá esta Ley tenga su fundamento en los análisis de ADN como única y suficiente prueba para accionar y obligar pecuniariamente a tanto macho salvaje e irracional y que esta prueba pueda ser solicitada y presentada sin muchas exigencias a los organismos respectivos por las madres, primeras ofendidas y afectadas, por los hijos e hijas y además por los abuelos o tíos que al final son los que pagan tanta irresponsabilidad paternal.
Exigimos, no con respeto, ni con consideración, sino con la obligación y responsabilidad que les compete a todos los diputados, principalmente a las mujeres diputadas, a adoptar una actitud consecuente y coherente respecto a esta ley. LIBRE y el PAC deben mostrar que están hechos de otra materia y no estar embarrados de tanta inmundicia de los partidos tradicionales y luchar por una verdadera ley que rompa con esta actitud tan irresponsable de los que se creen y se pregonan “hombres honorables” pero que abusan sexualmente de tantas jovencitas y dejan tirados y abandonados tantos niños y niñas.
¡¡Felicidades en su Día (aunque explotadas por la sociedad machista de consumo) a todas las generosas y maltratadas madres de Honduras, principalmente a las ejemplares madres solteras víctimas de la desvergonzada sociedad patriarcal!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario