Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), más de 360 migrantes perdieron la vida y más de 62.000 migrantes entraron en Grecia en enero de 2016; en el mismo periodo del año anterior entraron 1.472 personas.
La situación empeora para los refugiados según pasa el tiempo, y la Unión Europea y los diferentes Gobiernos, en lugar de aplicar las medidas a las que se comprometieron, aprueban nuevas medidas de criminalización hacia ellos y hacia los voluntarios que los ayudan. Un claro ejemplo es lo que sucede en Dinamarca, donde el Parlamento ha aprobado la confiscación de bienes que superen los 1.340 euros, al igual que se está haciendo en Suiza y en algunos Estados alemanes. También en Suecia, donde quieren deportar a 60.000 personas; o en Finlandia y Austria, donde quieren expulsar al 60%; y a la vez se están poniendo vallas y creando centros de detención por todo el territorio europeo. ··· Ver noticia ···
No hay comentarios:
Publicar un comentario