FUNDADOR DE LA FAMILIA SALESIANA

FUNDADOR DE LA FAMILIA SALESIANA
SAN JUAN BOSCO (Pinchar imagen)

COLEGIO SALESIANO - SALESIAR IKASTETXEA

COLEGIO SALESIANO - SALESIAR IKASTETXEA
ESTAMOS EN LARREA,4 - 48901 BARAKALDO

BIENVENIDO AL BLOG DE LOS ANTIGUOS ALUMNOS Y ALUMNAS DE SALESIANOS BARAKALDO

ESTE ES EL BLOG OFICIAL DE LA ASOCIACIÓN DE ANTIGUOS ALUMNOS Y ALUMNAS DEL COLEGIO SAN PAULINO DE NOLA
ESTE BLOG TE INVITA A LEER TEMAS DE ACTUALIDAD Y DE DIFERENTES PUNTOS DE VISTA Y OPINIONES.




ATALAYA

ATALAYA
ATALAYA

lunes, 25 de enero de 2016

Jubileo de la Misericordia y ley del celibato (5) Rufo González


Curas casados2“Dejar en libertad a los oprimidos”, paso previo a los “Misioneros de la Misericordia”
Texto de Isaías propuesto por el Papa para esta cuaresma jubilar (Mv. 17):

“Este es el ayuno que yo deseo: soltar las cadenas injustas, desatar los lazos del yugo, dejar en libertad a los oprimidos y romper todos los yugos; compartir tu pan con el hambriento y albergar a los pobres sin techo; cubrir al que veas desnudo y no abandonar a tus semejantes. Entonces despuntará tu luz como la aurora y tu herida se curará rápidamente; delante de ti avanzará tu justicia y detrás de ti irá la gloria del Señor. Entonces llamarás, y el Señor responderá; pedirás auxilio, y él dirá: `¡Aquí estoy!´. Si eliminas de ti todos los yugos, el gesto amenazador y la palabra maligna; si partes tu pan con el hambriento y sacias al afligido de corazón, tu luz se alzará en las tinieblas y tu oscuridad será como al mediodía. El Señor te guiará incesantemente, te saciará en los ardores del desierto y llenará tus huesos de vigor; tú serás como un jardín bien regado, como una vertiente de agua, cuyas aguas nunca se agotan” (Is 58, 6-11).


Vincular celibato y ministerio ha producido una opresión injusta
El texto de Isaías tiene dos núcleos temáticos: la libertad y la ayuda material (pan, cobijo, vestido, asistencia…). La disciplina celibataria queda afectada por el tema libertad: “soltar cadenas injustas, desatar los lazos del yugo, dejar en libertad a los oprimidos y romper todos los yugos. Si eliminas de ti todos los yugos, el gesto amenazador y la palabra maligna”. En la práctica, vincular celibato y ministerio legalmente ha producido una situación de opresión en muchos clériglos. Creo vigente el diagnóstico que hizo José María Díez-alegría:
“Las erróneas ideas de que el sexo es malo y de que los “sacerdotes” son “extraterrestres” están, sin duda, a la base de la descabellada institución del celibato obligatorio de los obispos y presbíteros. (La llamo descabellada, porque la experiencia histórica demuestra que es una cabezonería humana en que el Espíritu Santo no ha entrado, y que, por eso, siempre funcionó a trompicones). Pero hay otra razón profunda para la intransigencia en mantener, contra viento y marea, la obligación del celibato. La estructura totalitario-autoritaria de la Iglesia exige un clero separado de los fieles, dominante respecto a éstos, y mantenido él mismo en un puño por la jerarquía. Un poco como los jenízaros del antiguo sultán de Turquía. Para conseguir esto, es conveniente que sean célibes (psicológicamente el celibato impuesto se compensa con un afán de dominio), y que no puedan ganarse la vida mediante un trabajo civil” (Rebajas teológicas de otoño, Desclée de Brouwer, S.A. Bilbao 1980. Páginas 144-147).
¿Habrá sacerdotes casados entre los “Misioneros de la Misericordia”
“Durante la Cuaresma de este Año Santo tengo la intención de enviar los Misioneros de la Misericordia. Serán un signo de la solicitud materna de la Iglesia por el Pueblo de Dios, para que entre en profundidad en la riqueza de este misterio tan fundamental para la fe. Serán sacerdotes a los cuales daré la autoridad de perdonar también los pecados que están reservados a la Sede Apostólica, para que se haga evidente la amplitud de su mandato” (Mv. 18).
¿Quién puede ser mejor “signo de la solicitud materna de la Iglesia por el Pueblo de Dios” que un sacerdote “casado en Cristo”? Además del amor pastoral, tiene la experiencia “visceral” del amor de esposoy padre, que abre sus entrañas a la misericordia más plena. ¿Quién perdona mejor que unos padres que a su amor biológico unen el amor divino del Espíritu de Jesús? No suelen de ordinario los solteros ser muy proclives al perdón y la tolerencia. El trato dado a los sacerdotes casados es un ejemplo de lo que suelen hacer unos solteros, más amigos de la ley que del Espíritu.
Hay sacerdotes casados esperando justicia y misericordia en la Iglesia
Si con los de cerca no se es capaz de “romper todos los yugos”, ¿quién va a creer a los dirigentes eclesiales? Solucionar el problema de los sacerdotes casados sería un buen signo de credibilidad. Podría la cúpula eclesial seguir el consejo de Pablo (Rm 15, 1-3): “nosotros los robustos debemos cargar con los achaques de los endebles y no buscar lo que nos agrada. Procuremos cada uno dar satisfacción al prójimo en lo bueno, mirando a lo constructivo. Tampoco el Mesías buscó su propia satisfacción; al contrario, como dice la Escritura: `las afrentas con que te afrentaban cayeron sobre mí´ (Sal 69,10). Acabo de recibir un libro digitalizado, no editado aún, del fundador de ASCE (Asociación Sacerdotes Católicos Españoles). Se titula así: “Mantenemos viva nuestra vocación sacerdotal”, por José María Lorenzo Amelibia. Es su autobiografía religiosa: desde los signos primeros de vocación hasta sus ya más de ochenta años, pasando por los procesos de formación, ordenación presbiteral, ejercicio pastoral, crisis celibataria, emancipación clerical, etc. etc. Es su alma piadosa, enamorada de Cristo desde pequeño hasta ahora mismo. Admirable su sinceridad, su buena intención siempre, su esfuerzo por seguir dentro de la disciplina eclesial. Hoy destaco el documento que adjuntó a su expediente de “reducción al estado laical”, y que sigue esperando respuesta:
“José Mª Lorenzo y Amelibia, sacerdote de la diócesis de Pamplona, declaro al firmar el rescripto de secularización lo siguiente:
“1º.- No renuncio a mi sacerdocio ni al sacramento del orden que recibí. El motivo de pedir la dispensa de mis obligaciones sacerdotales es exclusivo en mi intención al celibato, que por razones de salud mental lo he solicitado.
2º.- La Iglesia me exige que no ejerza el sacerdocio públicamente al liberarme de la obligación del celibato, seré fiel a este mandato, como lo he sido a todos los mandatos de la Iglesia.
3ª.- Estoy dispuesto a ejercer el sacerdocio en cualquier momento en que la Iglesia me admita o permita.
4ª.- Pido que se me autorice en algunas ocasiones al año celebrar la Misa en mi domicilio de modo privado”.
¡Cuarenta y cinco años después, ninguna respuesta a este escrito! Quedará por siempre cubierto de polvo en los archivos. Poco después decidí estudiar a fondo el tema de la misa en el sacerdote secularizado”.
La lógica de Dios y la lógica de la Iglesia
Las expone el papa Francisco en la Bula del Jubileo:
“Según una lógica humana, es justo que Dios piense en rechazar el pueblo infiel: no ha observado el pacto establecido y por tanto merece la pena correspondiente, el exilio. Las palabras del profeta lo atestiguan: `Volverá al país de Egipto, y Asur será su rey, porque se han negado a convertirse´ (Os 11, 5). Y sin embargo, después de esta reacción que apela a la justicia, el profeta modifica radicalmente su lenguaje y revela el verdadero rostro de Dios: `Mi corazón se convulsiona dentro de mí, y al mismo tiempo se estremecen mis entrañas. No daré curso al furor de mi cólera, no volveré a destruir a Efraín, porque soy Dios, no un hombre; el Santo en medio de ti y no es mi deseo aniquilar´ (11,8-9)… Debemos prestar mucha atención a cuanto escribe Pablo para no caer en el mismo error que el Apóstol reprochaba a sus contemporáneos judíos: `Desconociendo la justicia de Dios y empeñándose en establecer la suya propia, no se sometieron a la justicia de Dios. Porque el fin de la ley es Cristo, para justificación de todo el que cree´ (Rm 10,3-4)…” (Mv 21).
Mover la maquinaria eclesial es humanamente imposible. Siempre recuerdo el caso de la Virgen de Guadalupe, patrona de Extremadura, cuyo santuario pertenece civilmente a la provincia de Cáceres, pero eclesialmente a la diócesis de Toledo. Llevan años pidiendo que pase a ser jurisdicción de una diócesis extremeña… No hay modo. Todo el mundo reconoce la anomalía, pero ahí sigue la muralla insalvable. Pues con el celibato opcional ocurre lo mismo. Parece mentira que la libertad cristiana pueda machacarse institucionalmente hasta este extremo. No importa que se deshumanicen personas y que comunidades no celebren la eucaristía… Derechos humanos y voluntad divina subordinados al derecho eclesiástico. No queda otra salida que pedir al Espíritu, contra toda esperanza eclesial, que se cumpla la voluntad divina “en la tierra como en el cielo” . Es curioso que se estén readmitiendo al ministerio a sacerdotes casados viudos. Si vive en matrimonio, no puede ejercer; hay que esperar que muera la mujer. Se está obedeciendo a la teoría del papa Siricio (384-399): “La relación sexual, incluida la conyugal, es suciedad (1186, 4-5); atontamiento con pasiones obscenas (1140, 13-14); lujuria (1138, 28); crimen (1138, 16-23); vida de pecadores (1186, 13-14); práctica de animales (1186, 22-23) y oprobio para la iglesia (1161, 5-7)” (Decretales de Siricio a Himerio, a los Obispos galos y a los Obispos africanos, recogidas en tomo XIII de la Patrología Latina).
El caso es que cuando se trata de ministros de otras confesiones -anglicana, ortodoxa…- no hay problema si se hacen católicos. ¡Cuánta contradicción, Señor!

No hay comentarios:

Publicar un comentario