D. Mario:
Con estas líneas queremos agradecerle que haya facilitado, como se lo indicábamos en nuestra propuesta del 11 de noviembre, algunas cifras concretas de las “acciones significativas en favor de los sin techo que nuestras comunidades eclesiales vienen llevando a cabo desde hace tiempo (como es la cesión de casas curales para “rentas sociales” y para otros usos en favor de la comunidad…)”.
Realizado este servicio informativo, creemos que es preciso dar “un paso más ante la urgencia de los desahucios” y adoptar las siguientes medidas, tal y como se lo trasladábamos en la referida propuesta:
1.- Evaluar si las casas curales (y por extensión, otras propiedades como, por ejemplo, locales parroquiales o inmuebles de titularidad diocesana), están efectivamente “vacías”, son “vaciables” o han sido “concedidas como segunda vivienda a diversas personas”. La atención a esta primera propuesta del Foro de Curas de Bizkaia (ampliada a otros inmuebles vacíos o infrautilizados) ayudaría a tener una mejor información del uso real.
2.- Creemos que, una vez clarificado debidamente el punto anterior y tomadas las decisiones pertinentes en favor de los desahuciados, convendría que ofertara “esta iniciativa a todas las instituciones de Iglesia (de religiosos o laicos), invitándoles a sumarse a la misma” (sabiendo que muchas de ellas ya lo están llevando a cabo) y que la extendiera “a cuantas personas tengan una segunda vivienda o viviendas desocupadas a hacer lo mismo”
En definitiva, no se trata de quedar bien ante la opinión pública, sino de seguir haciendo el bien. Y que Vd. lidere este paso adelante que le proponemos.
Con este recordatorio (y agradecimiento) esperamos despejar “el por qué” de la propuesta formulada en su día por el Foro de Curas de Bizkaia para que pueda superar la perplejidad o el desconcierto que la misma le haya podido producir.
Somos conscientes de que esta propuesta (y las decisiones que haya que adoptar en consonancia con la misma) no es más que una medida de emergencia a un problema que tiene hondas raíces y que requiere de un cambio radical. Por ello, le animamos a seguir denunciando las limitaciones de los ajustes realizados por el gobierno, a continuar insistiendo en la necesidad de una profunda reforma de la actual legislación y, sobre todo, a liderar la propuesta que le hemos formulado, tomando las decisiones oportunas en nuestra diócesis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario